Un fuerte aluvión, ocurrido el lunes 31 de enero, en el sector La Gasca , en Quito, capital de Ecuador, ha dejado hasta el momento 26 fallecidos, 53 heridos y 10 desaparecidos. La Iglesia ecuatoriana ha expresado su cercanía a las víctimas de esta tragedia.
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En un comunicado, la Conferencia de Obispos y Cáritas han indicado “en estos últimos días, con dolor, hemos visto cómo muchos de nuestros hermanos y hermanas sufren los avatares de las lluvias, de los desbordamientos de los ríos, de los daños ambientales”.
Por tanto, “como Iglesia nos hemos puesto inmediatamente al servicio de las poblaciones y comunidades afectadas en Coca, Sucumbíos, Tena, Latacunga, Babahoyo, Montalvo, Durán, Quito y tantas otras”.
La hora de la solidaridad
Asimismo han informado que la labor de Cáritas en todos sus niveles “nacional, diocesano y parroquial no han dado tregua a estos siniestros, y con su presencia de hermanos han repartido comida caliente, frazadas, colchones, víveres, atención médica, asistencia espiritual”.
Al tiempo advierten que “muchos de estos desastres pudieron ser evitados si cada uno actuara con responsabilidad, anteponiendo a sus intereses personales el bien común”.
A pesar de todo, destacan que “la fuerza de nuestro pueblo es admirable, su solidaridad es ejemplar. ¡Qué nadie sea indiferente al dolor de los demás!”.
Para ello “el Papa Francisco nos recuerda que no es una opción posible vivir indiferentes ante el dolor, no podemos dejar que nadie quede “a un costado de la vida”.
“Esto nos debe indignar, hasta hacernos bajar de nuestra serenidad para alterarnos por el sufrimiento humano. Eso es dignidad”, acotaron.
Seguir acompañando
Por otra parte, han agradecido “a todos los católicos del Ecuador, a los hombres y mujeres de buena voluntad que confían en la acción pastoral de la Iglesia para ir en auxilio inmediato de los cientos de damnificados”.
Además han extendido su agradecimiento “a la policía, del ejército, del cuerpo de bomberos, de los servicios de auxilio que trabajan sin descanso y sin mayores recursos”.
“ Nuestro compromiso, más allá del impacto del momento, es no dejar de acompañar a quienes hoy han perdido un ser querido , a quienes han visto el trabajo de su vida sepultado en el lodo; seguiremos coordinando acciones y uniendo esfuerzos para que puedan recomenzar la vida”, apuntaron.
Foto: GK