“Estoy y he estado siempre a favor de que se investiguen los abusos a menores y de que se diriman responsabilidades”. Así lo ha expresado el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, en declaraciones a Europa Press.
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Por otro lado, Gabilondo ha asegurado que no tuvo conocimiento de ningún caso de abusos sexuales a menores en el colegio en el que estuvo impartiendo clases cuando pertenecía a la congregación de los Hermanos del Sagrado Corazón. “De haberlos conocido los hubiera denunciado”, ha afirmado.
Carmen Calvo ha defendido hoy la “independencia” de Gabilondo, al sacar los medios a la luz su pasado en una congregación religiosa. Así, ha pedido “respeto” para la institución y para el Defensor del Pueblo, “catedrático de ética” y conocido por sus “actitudes tolerantes”.
Calvo pide la “cooperación” de la Iglesia
El PSOE ha registrado hoy en el Congreso de los Diputados la proposición no de Ley para que Gabilondo y su equipo sean los responsables del informe sobre abusos en la Iglesia. “Se trata de afrontar de la manera más rigurosa posible, empática y justa con las víctimas un asunto al que nuestro país no puede dar más largas”, ha apuntado la ex vicepresidenta del Gobierno, recuperada por Pedro Sánchez para recabar apoyos parlamentarios para investigar la pederastia eclesial.
En la misma comparecencia, Calvo ha desvelado que “la ministra de Justicia pidió a la Conferencia Episcopal Española un informe acerca de los datos de abusos que tenía. Quisimos hacer un trabajo conjunto para saber el estado de la cuestión. Esa carta llegó a la CEE para iniciar un primer movimiento… pasado el tiempo, viendo que el asunto no avanza, hay que tomar decisiones”.
La diputada socialista ha pedido la “cooperación” de la Iglesia. Según Calvo, acompañada por el portavoz del Grupo Socialista, Héctor Gómez, “necesitan” al Episcopado porque “una parte importante de la información y la documentación tendrá que venir de la mano de la propia Iglesia católica”.
Preguntados sobre si se articulará algún mecanismo para obligar a los obispos a colaborar, Gómez ha confiado en “el entendimiento y la participación voluntaria” de la Iglesia.
Bolaños: “Esto no va contra la Iglesia”
Por su parte, el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, desde los micrófonos de la SER ha asegurado que “esto no va contra la Iglesia católica, en absoluto, lo que queremos es, al revés, que la Iglesia pueda también colaborar en destapar personas que hayan cometido delitos. Estamos hablando de delitos, de delincuentes, de pederastas. De eso estamos hablando”.
Bolaños ha desvelado que la semana pasada conversó en varias ocasiones con el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Juan José Omella, para trasladarle la vía Gabilondo en la que pensaba el PSOE y pedirle, incluso, que la Iglesia “se incorporara a esa comisión independiente de expertos, porque la Iglesia tiene investigaciones en marcha y es importante que todo ese conocimiento estuviera aquí”. Según sus propias palabras, el purpurado no le dio una respuesta fija, pues debería decidirlo de forma colegial con los miembros de la CEE.
Según Bolaños, esta fórmula –y no una comisión parlamentaria como han propuesto Unidas Podemos, EH Bildu y ERC– es la preferida por el Gobierno, pues “tiene todas las garantías y garantiza mejor la privacidad de las víctimas”. Y es que, según ha explicado en su entrevista en ‘Hoy por Hoy’, lo que pretenden es que “se escuche a las víctimas”. Así, Bolaños ha afirmado que sus socios de Gobierno apoyarían esta fórmula. “Hemos hablado con ellos y lo ven bien”, ha señalado.
“A nosotros nos parece que es más útil y que acompaña mejor a la víctimas, ya que hay quienes quieren hacer pública su historia, pero hay otras que no quieren”, ha recalcado recordando que se trataría de un “entorno amable, confidencial”.
“No son plazos cortos”
Asimismo, durante los casi 10 minutos que Ángels Barceló y Bolaños han estado charlando sobre la cuestión, el ministro ha trasladado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “está muy impactado con los testimonios”. Por eso, desde el Ejecutivo creen firmemente que “no pueden quedar impunes los abusos producidos durante décadas. No podemos permitir como sociedad que haya personas que hayan sufrido abusos”.
Eso sí, en relación a los tiempos, el ministro de la Presidencia ha sido realista al admitir que “no son plazos cortos por la experiencia internacional que tenemos”. Y ha añadido: “Estamos hablando de años, porque no es una investigación fácil, son asuntos con protagonistas que a veces han fallecido, es una investigación larga y lo importante es hacerla con rigor y que las víctimas se sientan amparadas y acompañadas“.
Preguntado por la periodista sobre la posibilidad de hacer extensible la investigación a otros ámbitos, se ha pronunciado así: “Nosotros queremos proteger a cualquier víctima. El Gobierno no tiene el más mínimo inconveniente, muy al contrario, en investigar allí donde pueda haber un abuso”.
