Chile: la Comisión Constituyente rechaza propuesta sobre libertad religiosa

14/02/2022 | Roberto Urbina Avendaño

La propuesta de las iglesias y confesiones fue presentada por el obispo de San Bernardo quien responde a Vida Nueva sobre este rechazo

La Convención Constituyente de Chile, cuyos 155 integrantes fueron elegidos por votación popular, ha entrado en la etapa de aprobación de las propuestas de contenidos para la futura Constitución. Estas aprobaciones aún ocurren en las comisiones, antes de llegar al plenario donde necesitarán el apoyo de 2/3 de los constituyentes para ser parte del proyecto de nueva Constitución que deberá ser aprobado en un plebiscito.

Para elaborar esos contenidos la Convención abrió una plataforma digital en la que se pudo postular ‘Iniciativas Populares de Norma’ que requerían 15 mil firmas de respaldo para ser acogidas.

Un grupo de 10 iglesias y confesiones entregaron, en octubre pasado, su propuesta sobre libertad religiosa y de conciencia, superando lejos el mínimo de firmas exigido. Fueron invitados a exponerla ante la Comisión de Derechos Fundamentales de la Convención, el 24 de enero pasado. La presentación estuvo a cargo del obispo de San Bernardo, Juan Ignacio González, coordinador del grupo, acompañado del obispo evangélico Francisco Javier Rivera.

Rechazan propuestas con apoyo de 80 mil personas

Este jueves, la Comisión llevó a votación las diferentes propuestas recibidas desde la plataforma digital, momento en que todas ellas fueron rechazadas. Al contrario, con el voto de 32 de los 33 integrantes de la Comisión, se aprobó la propuesta elaborada por un grupo de 16 integrantes de la misma Convención.

Ante esta situación, Vida Nueva pidió su parecer al obispo González.

PREGUNTA.- ¿Cuál es su opinión sobre la votación de ayer en la Comisión?

RESPUESTA.- La Comisión de Derechos Fundamentales desechó las propuestas que venían como Iniciativa Popular de Norma sobre libertad religiosa, que eran varias y aglutinaban el apoyo de 80.000 personas. Es un muy mal signo, porque muestra que la participación popular, de la que tanto se habló, por lo menos en esta materia, no tuvo influjo alguno en la Comisión. Se ha preferido una propuesta de norma que venía de convencionales, o sea desde dentro. Es una propuesta aceptable en lo esencial, pero le faltan elementos importantes. La aprobada es una propuesta minimalista.

P.- ¿Qué es lo esencial de la propuesta que presentaron las iglesias?

R.- La definición de los contenidos de la libertad religiosa y de creencia, el reconocimiento jurídico a las confesiones, la capacidad de estas de regirse por sus propias normas, la inviolabilidad de la conciencia, que cautela la objeción de conciencia en ciertos casos y el derecho de los padres y tutores a escoger la educación religiosa de los hijos o pupilos. Y algo muy esencial hoy, el derecho de las confesiones para establecer acuerdos de cooperación, sobre todo en aquellas materias como educación, salud, atención de lugares de reclusión, etc. El área de la contribución social de las confesiones es muy determinante y creo que no siempre considerada.

Asegurar la libertad religiosa

P.- ¿Por qué es tan importante el tema de los acuerdos de cooperación?

R.- Porque es la manera efectiva de asegurar la libertad religiosa y de creencias. Hoy en Chile, todo lo que las confesiones hacen en esos ámbitos está sujeto a la decisión unilateral del Estado, por la vía administrativa. Estamos en la época de los acuerdos y ese es el camino que las confesiones han seguido en muchas partes. Creo que, para muchos convencionales, como lo comprobé yo mismo al asistir a la Comisión, las confesiones son asimilables al derecho de asociación. Algunos creen que bastaría con ello. Es un error grave de perspectiva, que indica una infravaloración de la libertad religiosa y que pone la religión dependiente, de alguna manera, del Estado.

P.- ¿Qué pasos propondrán para continuar en este proceso?

R.- Queda aún que el pleno apruebe las normas que ya lo fueron en las comisiones. Allí, los mismos convencionales pueden hacer llegar indicaciones, que deben ser votadas. Estamos estudiando la propuesta aprobada y la idea de hacer sugerencias por la vía de las indicaciones.

P.- ¿Tiene esperanza en que esos avances sean posibles en el pleno?

R.- No lo sé. Creo que, si no quedan incluidos los elementos esenciales, no se habrá aprovechado un momento importante para consolidar en Chile un verdadero reconocimiento de la libertad religiosa y de conciencia. Incluso puede haber una regresión a la hora de dictar las normas aplicativas de la carta fundamental.

P.- ¿Cuál es el sentimiento que ha quedado en el grupo de confesiones que presentaron la propuesta que ha sido rechazada?

R.- La propuesta era apoyada por todas las confesiones más importantes del país y pueblo originarios: católicos, ortodoxos, anglicanos, evangélicos, musulmanes, judíos, adventistas, mormones, etc. Ha sido un trabajo de ‘ecumenismo práctico’ de alto valor y todos los apreciamos así. Pero hay frustración. Un esfuerzo de meses, con estudios, diálogos, acuerdos y luego, digamos, de ‘una plumada’ queda fuera. Creo que la ideología pudo más que la razón. Pero seguiremos trabajando, porque la libertad religiosa y conciencia está en el corazón de un régimen democrático y libertario.