El papa Francisco divide en dos la Congregación para la Doctrina de la Fe: Sección Doctrinal y Sección Disciplinaria. El ex Santo Oficio se reformula “después de décadas en las que se han empleado muchos esfuerzos y recursos humanos en el examen de los casos de abuso”, como señala el comunicado vaticano divulgado a través de Vatican News. Por ello, el motu proprio ‘Fidem servare’ –’Custodiar la fe’– otorga un secretario propio a cada departamento.
- PODCAST: Las víctimas de abusos, en el centro
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La decisión del Pontífice de modificar la estructura de Doctrina de la Fe, aunque no lo menciona explícitamente, ayudará, sobre todo, a que las denuncias de abusos contra sacerdotes se puedan investigar de forma más eficaz, pues las constantes denuncias provocaban retrasos en la gestión de otros asuntos.
El prefecto –el cardenal español Luis F. Ladaria, SJ– tendrá dos secretarios –con los que colaborarán el subsecretario y los respectivos jefes de Oficina– para que cada sección tenga más fuerza y más autonomía y así “dar la debida importancia a la sección doctrinal y a su papel fundamental en la promoción de la fe, sin disminuir la actividad disciplinaria”.
La Sección Disciplinaria se ocupará de los delitos reservados a la Congregación y tratados a través del Supremo Tribunal Apostólico, como son los casos de pederastia. La tarea de la Sección es “preparar y elaborar los procedimientos previstos por las normas canónicas para que la Congregación, en sus diversas instancias (prefecto, secretario, promotor de justicia, congreso, sesión ordinaria, colegio para el examen de los recursos en materia de ‘delicta graviora’), pueda promover una correcta administración de justicia”, señala el Papa.
Para ello, la Sección Disciplinaria “promueve iniciativas de formación adecuadas” ofrecidas a los obispos y a los juristas, “con el fin de favorecer una correcta comprensión y aplicación de las normas canónicas relativas a su ámbito de competencia”, explica Francisco.
La Sección Doctrinal
Por su parte, la Sección Doctrinal se ocupará “de los asuntos relativos a la promoción y protección de la doctrina de la fe y la moral. También promueve estudios destinados a incrementar la comprensión y la transmisión de la fe al servicio de la evangelización, para que su luz sea un criterio de comprensión del sentido de la existencia, sobre todo ante los interrogantes que plantean el progreso de las ciencias y el desarrollo de la sociedad”, según Jorge Mario Bergoglio.
Asimismo, examina los documentos que van a ser publicados por otros dicasterios, así como los escritos y opiniones que “parecen problemáticos para la recta fe, fomentando el diálogo con sus autores y proponiendo remedios adecuados”. A esta sección se le confía la tarea de estudiar las cuestiones relativas a los ordinariatos personales de los ex anglicanos y la gestión de la Oficina Matrimonial, que se ocupa, entre otras tareas, de los procesos de nulidad.
