Esta mañana, en la Casa Pastoral “Monseñor Juan Sinforiano Bogarin” dieron a conocer el decreto por el cual se nombra a Adalberto Martínez Flores como arzobispo de la Santísima Asunción. El presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya continuará como Administrador Apostólico del obispado de las FF.AA. y la Policía Nacional.
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Participaron del encuentro con los medios de comunicación, los arzobispos eméritos: Edmundo Valenzuela Mellid y Pastor Cuquejo, y el Nuncio Apostólico en Paraguay; Amancio Benítez Candía, obispo de Benjamín Aceval y secretario general y el P. Sergio Ayala Viveros, secretario general adjunto de la CEP.
El mensaje fue leído por el Señor Nuncio, Eliseo A. Ariotti, quien informó que el Santo Padre aceptó la renuncia del arzobispo Valenzuela Mellid, después de los dos años de prórroga que le había otorgado en el 2019.
Mensaje al pueblo paraguayo
Después de agradecer a Dios y todos los que lo acompañaron en los compromisos pastorales en su servicio a la Iglesia del Paraguay, expresó: “Estoy volviendo a mi casa. En efecto, en esta arquidiócesis he sido recibido e incardinado por el querido Mons. Felipe Santiago Benítez Ávalos allá por el 1994…”.
Martínez Flores comentó que, en 24 años de episcopado, su obediencia fue siempre decir «sí» para los cambios y traslados, y recordó su paso por las distintas jurisdicciones.
Expresó que ahora la Iglesia le pide asumir la responsabilidad como Arzobispo Metropolitano. “Aquí estoy, para hacer la voluntad de Dios y ser un instrumento al servicio de la construcción de su Reino en esta Iglesia particular de la Santísima Asunción y en comunión con mis hermanos Obispos para animar, animarnos juntos, a toda la Iglesia en el Paraguay”.
Aseguró que pondrán los medios necesarios para impulsar las orientaciones del Concilio Vaticano II y del Magisterio los padres de la Iglesia, y las de la exhortación apostólica “la Alegría del Evangelio”. Asimismo, señaló que acompañarán y animarán las iniciativas pastorales del papa Francisco y el trabajo del episcopado latinoamericano con el Sínodo sobre la Sinodalidad y la Asamblea Eclesial.
Confirmó que la Iglesia paraguaya quiere responder a la confianza de la ciudadanía y se comprometió a favorecer la cultura del encuentro para propiciar el diálogo y la concertación social para el bien común.
El nuevo arzobispo tomará posesión de su sede episcopal el próximo 6 de marzo, a las 11.