La CONFER han querido, por medio de un comunicado, mostrar su “apoyo y solidaridad al pueblo ucraniano, especialmente a los más vulnerables, que están sufriendo tanto dolor por la situación que se está viviendo en su país tras la guerra declarada por Rusia”.
“La violencia nunca es la solución a los problemas”, han recordado los religiosos y religiosas españoles, que abogan “por el diálogo para acercar las diferencias” y por “usar la inteligencia para que ambas partes logren entenderse”.
Asimismo, han mostrado su cercanía a la Iglesia ucraniana, cuyos miembros “vivirán mucho más de cerca esta lamentable guerra“, así como a las congregaciones presentes en Ucrania, “cercanas a las nuevas necesidades que ahí se generan”. Además, han señalado la importancia de que las congregaciones en Rusia se muestren “disidentes” ante la “guerra y la violencia” para “explicitar que la población no apoya a su gobierno en estos hechos”.
Por otro lado, se han unido “a las palabras del papa Francisco donde hacía un llamamiento a quienes tienen responsabilidades políticas, para que hagan un serio examen de conciencia delante de Dios, que es Dios de la paz y no de la guerra; que es Padre de todos, no solo de algunos, que nos quiere hermanos y no enemigos”.
Por último, la CONFER concluye con un llamamiento: “que todas las comunidades religiosas puedan unirse en los diferentes lugares a las iniciativas que surjan en favor de la paz” y, además, que llegado el momento abran sus puertas “a aquellos/as que necesiten acogida como refugiados/as“.