“Nadie logrará destruir nuestras aspiraciones de paz y libertad”. Es el grito de esperanza que lanza el padre Vyacheslav Grynevych, director Ejecutivo de Caritas-Spes Ucrania, a través de un vídeo difundido por Cáritas Internationalis sobre la dramática situación que atraviesa el país europeo tras la invasión Rusa.
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“En este momento dramático, pero nos quedamos para ayudar, continuamos ayudando valientemente a las personas necesitadas”, asegura el sacerdote sobre la labor que están llevando a cabo, en medio de la guerra, los 67 profesionales de la entidad eclesial, así como sus 120 voluntarios. “Con la ayuda de Dios, continuaremos nuestro servicio, sin dejar a nadie atrás”, se compromete Grynevych.
Caritas-Spes es una de las dos organizaciones ucranianas que forma parte de la confederención internacional junto a Caritas Ucrania. La plataforma eclesial ayuda ya a 13.000 ucranianos en diferentes puntos del país, especialmente en áreas tan críticas de la capital, así como en Kramatorsk, Rubizhne, Zaporizhya, Volnovakha. , Mariupol, Kharkiv, Dnipro, Zhytomyr, Ivano-Frankivk y Odesa.
Los más vulnerables
El apoyo, tal y como explica Cáritas, se está llevando a cabo de una manera integral, con una especial atención a los miles de desplazados internos a los que se está facilitando alimentos, agua potable y kits de higiene personal, así como un lugar seguro para dormir, comer y lavarse.
“Estoy realmente orgullosa de nuestro equipo que está trabajando arduamente para atender las necesidades de los más vulnerables, al mismo tiempo que afronta sus propias circunstancias”, expone Tetiana Stawnychy, presidenta de Caritas Ucrania, agradecida por “la gran cantidad de apoyo de nuestros socios y personas de buena voluntad del extranjero”.
