En Venezuela los tepuyes son formaciones rocosas muy grandes y elevadas, ubicadas en la Gran Sabana, al sur de Venezuela y reconocidas por la Unesco como patrimonio de la humanidad.
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En los últimos días han estado en el ojo del huracán de las redes sociales por la celebración de fiestas lujosas en las cimas de estas formaciones milenarias, consideradas el tesoro de la amazonía venezolana.
Por ello, la Repam de este país ha expresado su indignación, porque “nos hemos enterado por las redes sociales de la fiesta organizada en el Parque Nacional Canaima, que forma parte del escudo guayanés situado en el Estado Bolívar”.
“Es una expresión más de las múltiples agresiones que siguen aumentando en relación a la explotación de esta zona tan peculiar de Venezuela y a sus habitantes”, acotaron.
Atentado contra la naturaleza
La Repam ha recordado que la zona de los tepuyes “es uno de los territorios más antiguos del plantea, con ecosistemas sumamente frágiles y vulnerables, lugar de incomparable belleza natural, rico en biodiversidad”.
Asimismo señaló que “los cerros, los ríos, los manantiales, las rocas y todo aquel maravilloso ambiente, junto con su enorme carga biológica y ecológica, representan un escenario vital para el desarrollo de la cosmovisión y de la espiritualidad” de los pueblos indígenas.
Entre los que habitan la zona están “el Pueblo Pemón y de sus vecinos Akawayos (Guyana Inglesa), y Wapichanas (Brasil)”.
Por tanto “estos hechos ocurridos allí constituyen un atentado a la conservación de la naturaleza, de los recursos naturales de nuestro país en diferentes niveles”.
Convivencia pacífica
“Como Red Internacional impulsada por el Papa Francisco, condenamos estos inconcebibles hechos, los cuales constituyen lamentablemente una violación más a la larga lista de atropellos y agresiones que se llevan adelante en este territorio de la geografía venezolana”, acotaron.
Situación que se viene generando, según la organización, “desde la aprobación y puesta en marcha del terrible proyecto del Arco Minero del Orinoco” por parte del régimen de Nicolás Maduro.
En tanto el llamado es a renovar “la construcción de una convivencia pacífica y no agresiva, en armonía, respetuosa del ambiente natural y social” y “unidos a los pueblos indígenas, afroamericanos, campesinos y pobladores de la región amazónica de Venezuela”.
Foto: Wikipedia
