“El papa Francisco representa en estos momentos esperanza, ilusión y cambio por su defensa del reparto de la distribución de la riqueza y del Estado de bienestar”. Pepe Álvarez ‘dixit’. El secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT) ha conversado hoy con el obispo de Bilbao, Joseba Segura, y el vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Lorenzo Amor, en el marco del II Congreso Iglesia y Sociedad Democrática, organizado por la Fundación Pablo VI bajo el lema ‘El mundo que viene’, que se celebra desde ayer y concluirá esta tarde.
En la mesa redonda que lleva por título ‘La nueva economía y el futuro del trabajo’, Álvarez ha recalcado un gran valor del Papa: “Es un hombre que se explica”. Y es que, “si uno lee encíclicas de otros pontífices se da cuenta que la defensa de los trabajadores ha formado parte de la Doctrina Social de la Iglesia”, pero es Francisco quien lo relata con palabras llanas.
El secretario general de la UGT ha concretado durante una de sus intervenciones que “la economía debe estar al servicio de las personas, porque si no, ha perdido su función”. Por otro lado, ha puesto en valor la ecología como eje para la economía que viene.
Por su parte, Joseba Segura, ha destacado que hoy, el trabajo, “como siempre, es un tema esencial de la vida humana”, pues “para la mayoría de la gente el trabajo es la fuente de recursos que le permiten vivir con dignidad”, dijo tras escuchar testimonios de autónomos, pequeños y grandes empresarios, entre otros.
Hablando sobre la reforma laboral, que ha supuesto un hito, al ser el primer acuerdo en la democracia española entre sindicados, empresarios y Gobierno, el prelado vasco ha puesto en valor que “el acuerdo en material laboral era un ejercicio de diálogo que esta sociedad necesitaba”.
Más allá de la opinión de unos u otros partidos, Segura considera que “representa la estabilidad que este país y el mercado laboral requiere”.
Durante sus intervenciones, el también obispo responsable del Sostenimiento de la Iglesia ha puesto en valor la formación profesional para los jóvenes, la educación integral o la necesidad de insistir en una banca ética. Pero todo ello sin olvidar a los últimos: “Estemos atentos de quienes van a sufrir más esta crisis”.
Para quienes duden de la conveniencia de que la Iglesia hable sobre economía, Segura les responde: “Nosotros no tenemos las respuestas sobre cómo organizar el futuro del trabajo, pero estamos convencidos de que podemos hacer experiencias significativas”.
Por último, Lorenzo Amor ha puesto el foco en “el trabajo digno, el trabajo decente”, como el pilar fundamental en el que “todos coincidimos”. En este sentido, puso en valor la denominada ‘Ley rider’, que ofrece un respaldo real a estos trabajadores, principal foco del precariado.
En otro orden, ha hecho hincapié en la necesidad de “saber aprovechar los fondos europeos”, que representan “una buena noticia para España”.