El Patriarca Kirill de Moscú ha entregado al líder de la Guardia Nacional rusa, Viktor Zolotov una imagen de la Virgen María con la confianza de obtener una “rápida” victoria sobre los ucranianos. Así lo presentó el líder de la Iglesia ortodoxa rusa en una celebración en la iglesia del Salvador de Moscú.
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Una victoria rápida
El militar agradeció el icono de manos del patriarca convencido de que “esta imagen protegerá al ejército ruso y hará que nuestra victoria sea más rápida”, ya que, lamentó, “las cosas no van tan rápido como nos gustaría”. En su agradecimiento destacó que “los nazis –en relación a los ucranianos– se esconden detrás de los civiles, los ancianos y los niños”.
En su alocución, tras la celebración de la Divina Liturgia, Kiril condenó que los ucranianos se refieran al Patriarcado de Moscú como la “iglesia de los conquistadores”, una expresión que considera blasfema e insultante, según recogen medios ortodoxos. Por otra parte, el líder religioso justificó que las iglesias ucranianas que no han manifestado al patriarca su adhesión no lo hacen “por miedo” ya que “todos pertenecemos a la Única Santa Iglesia Católica y Apostólica, la misma Iglesia que se encuentra tanto en Moscú como en Kiev”, negando toda posibilidad de liberación del Patriarcado de Moscú. Reiteró que “fuerzas ajenas a la Iglesia que quieren destruir la unidad espiritual de nuestros pueblos” y pidió la protección de Dios para todos los que están en suelo ruso, “que ahora incluye a Rusia, Ucrania y Bielorrusia”.
Centro de rehabilitación infantil
Mientras, el metropolitano Hilarión de Volokolamsk –número 2 del patriarcado ruso– presentó en público la puesta en marcha un centro de Rehabilitación y Prótesis Infantil en Damasco para ayudar a los niños sirios que han sufrido la pérdida de miembros durante el conflicto militar. Una iniciativa en la que se han implicado diferentes especialistas médicos rusos.
En un programa de televisión, relató que “hace unos años pusimos en marcha un programa para la rehabilitación de los niños sirios que tropezaron con una mina o sufrieron de otro modo el conflicto armado”. Hilarión dio cuenta de los traslados que se han hecho a Rusia de algunos de los niños con mayores dificultades. Destacó además que en la inauguración del centro, el pasado 6 de marzo, participaron ministros del Gobierno sirio, el alcalde de Damasco y otros representantes de las autoridades, líderes religiosos y públicos. “Esperamos que en un futuro próximo la Fundación considere nuestra petición de asignar fondos para ayudarnos a continuar esta noble e importantísima obra, que se inició con la bendición de Su Santidad el Patriarca Kirill de Moscú y toda Rusia y con la participación de Su Beatitud el Patriarca Juan X de Antioquía”, conclutó.
