De seminarista a rector en solo dos años. Millán Núñez Ossorio (Benavente, 1993) es el rector de seminario más joven de España. Este sacerdote zamorano se ordenó en julio de 2019, pero en realidad nunca ha salido del seminario. Ya desde que era diácono participaba en la formación de los más pequeños del seminario menor, tras ordenarse pasó a ser formador de forma oficial.
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Y en julio de 2021, apenas seis meses después de que Fernando Valera aterrizara en la diócesis como nuevo obispo, decidió confiarle al joven sacerdote la guía de los seminarios mayor y menor, amén de nombrarlo responsable de pastoral vocacional y de pastoral juvenil. “Poco tiempo ordenado, pero con mucha tarea”, dice entre risas en conversación con Vida Nueva con motivo del Día del Seminario, que se celebra el 19 de marzo con el lema Sacerdotes al servicio de una Iglesia en camino.
Teologado de Ávila
¿Por qué poner al frente de la formación a un cura tan joven? “Buena pregunta para el obispo”, se ríe el presbítero. Pero en realidad, es una cuestión que él también se hizo en su momento para poder poner una y mil excusas al prelado. “Le dije que había sacerdotes más preparados y con más experiencia, que yo era muy joven… Quizá otro con más experiencia podría acompañar mejor a los seminaristas”, detalla el sacerdote, que acompaña actualmente a tres jóvenes que estudian en el Teologado de Ávila en Salamanca y cada fin de semana vuelven a la diócesis. De hecho, curiosamente, uno de ellos fue compañero en el Teologado del ahora rector. Por su parte, en el seminario menor hay cuatro adolescentes y otros 34 alumnos en el colegio.
Pese a las dudas primeras de Millán, el obispo le animó: “Me dijo que creía que lo podía hacer bien. Me ponía de ejemplo a los sacerdotes operarios, que es un carisma para la formación sacerdotal y al ordenarse se consideran idóneos para estar en el seminario, y que mi situación no era diferente”. Los motivos del obispo, según recuerda, fueron dos: “Veía que tenía el corazón en el seminario y observaba cualidades en mí que podían ayudar”. En realidad, “siempre habrá opiniones diversas sobre quién debe desempeñar esta función. Yo lo que tengo claro es que cuando te piden un servicio debes entregar todos tus dones y cumplir la voluntad de Dios, lo que el Señor te pide a través de su Iglesia”.