“Nunca en la historia de la humanidad hubo tanta solidaridad en la sociedad”. Con naturalidad, el padre Ángel García puso en valor esta mañana la entrega de los españoles ante la invasión de Ucrania. “Hay casi más casas de acogida que refugiados en España”, expresó el presidente fundador de Mensajeros de la Paz, durante un desayuno informativo organizado por New Economy Forum.
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“Es verdad que la Iglesia ha hecho cosas por las que tiene que pedir perdón, pero también ha sido pionera en lo social, lo mismo con los leprosos que con los enfermos de sida, y por supuesto ahora con la crisis ucraniana”, planteó, convencido de que “hay que seguir y amando esa institución en la que yo sigo creyendo”.
Dialogar por la paz
Sobre la posibilidad de una solución al conflicto, apuntó que “todos los líderes están haciendo lo imposible para que esto termine”. “Debemos dialogar, como dice el Papa Francisco, para lograr la paz”, recomendó.
En relación a su visita reciente al Parlamento Europeo tras acudir a la frontera polaca, expresó su alegría por encontrarse “una caja de resonancia en tanto que todos están preocupados y que quieren hacerlo lo mejor posible”. “Les he dicho a los políticos que tienen que ir a la frontera igual que se mueven durante las campañas electorales”, comentó.
Seguir luchando
En el desayuno había presente algunos de los beneficiarios de los programas de Mensajeros de la Paz, entre ellos, refugiados ucranianos que llegaron a Madrid de la mano de la caravana de taxistas que puso en marcha hasta la frontera de Polonia.
El padre Ángel no dudó en sacar la cara por el informe Foessa de Cáritas y animó a la plataforma de la Iglesia a que “siga diciendo lo que tiene que decir”: “No tenemos que tirar la toalla. Estamos luchando contra la pobreza no contra los políticos. Les invito a que vayan a ver las filas y las colas de aquellos que van a pedir una bolsa con un poco de comida, no son actores”.
Incómodos
“No he contado si hay un millón de pobres o solo siete, pero en este país la pobreza existe”, dijo. En esta misma línea, reconoció que “somos incómodos para los políticos, pero espero que no nos vean como adversarios, porque no lo somos”.
Los organizadores del encuentro solicitaron la intervención del cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, presente en el desayuno. “El padre Ángel siempre es profeta y nos indica donde tenemos que mirar y poner nuestro corazón”, expresó el también vicepresidente de la Conferencia Episcopal.
Somos comunidad
Por su parte, la vicesecretaria del PSOE, Adriana Lastra, destacó el compromiso del padre Ángel para hacernos ver que “no somos electrones libres, sino que somos comunidad”. Lastra apuntó que “a veces los consensos son animales mitológicos en política”, lo que no significa que haya que renunciar a ellos en la lucha contra la pobreza. El secretario general de UCT, Pepe Álvarez, también reconoció “la capacidad de atracción” del padre Ángel para aunar esfuerzos, no para resolver problemas en la superficie, sino para afrontarlos “desde lo profundo”.
“El padre Ángel es una buena persona que ha dedicado su vida a los demás”, señaló el presidente de Asturias, Adrián Barbón, encargado de presentar a presidente fundador de Mensajeros de la Paz. Con este punto de partida, elogió “su voluntad y valor en grandes dosis y a partes iguales” para afrontar tanto “la pobreza” como los “enredos burocráticos” que enfrenta diariamente. “Sigue dándonos lecciones. Siempre me tendrás en tu equipo, eres motivo de inspiración”, elogió.
Como antiguo alumno del colegio San José de las dominicas en Sotrondio, puso en valor la reapertura del centro de las religiosas como casa de acogida para refugiados ucranianos, reflejo de la entrega de la sociedad asturiana, española y europea para “estar a la altura” de las dificultades que está provocando la guerra.