Se trata de una iniciativa promovida por la Plataforma Extremadura Vaciada para reivindicar un futuro para las zonas rurales
El próximo jueves las campanas de las iglesias de Extremadura sonarán por la España vaciada. Así, los obispos extremeños han convocado a las comunidades cristianas de la región, tal como informa Europa Press, a participar en esta iniciativa promovida por la Plataforma Extremadura Vaciada para reivindicar un futuro para las zonas rurales y menos pobladas de la región.
El manifiesto, que se leerá a las 12:00 horas de mañana, apunta “que las campanas nos recuerden que no debemos dejar morir nuestros pueblos“. El manifiesto que ha sido impulsado por las diócesis de Mérida-Badajoz, Coria-Cáceres y Plasencia, a petición de la Plataforma Extremadura Vaciada, el Movimiento Rural Cristiano y los grupos de Pastoral Rural Misionera.
La realidad de la España vaciada se caracteriza por la “fragilidad“, que se constata al ver cada vez menos niños y menos maestros para atenderlos, más ancianos y más dependencia. “Y una buena muestra de nuestra fragilidad la sufrimos cada día, con la precariedad sanitaria”, asevera el texto.
Haciendo también referencia al déficit de las comunicaciones, “sin tren, sin las autovías precisas, con falta de transporte público”, y sin recibir “las ayudas precisas para asentar población”, el documento añade que el campo “sufre por la subida de los insumos agrarios”.
No obstante, recoge que hay “motivos para la esperanza”, al encontrar “signos positivos”, pues a pesar de que continúa la pérdida de población, hay gente que regresa a los pueblos y hay también “gente nueva” en las casas y calles de los pueblos, así como se ven promociones de viviendas sociales y “no faltan proyectos de recuperación del entorno y de espacios abandonados”.