Sevilla no es toda España, pero sí ejerce de termómetro del regreso de la piedad popular a las calles después de un año de pandemia. Y, a juzgar por las cifras, las procesiones han vuelto con más fuerza que en el periodo previo al covid, tanto en el número de penitentes como de público asistente.
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Solo en la popular Madrugá de la capital hispalense, las autoridades calculan que participaron en las calles más de un millón de personas en una ciudad con menos de 700.000 habitantes. Fue la respuesta a la salida de las seis hermandades que procesionan en la noche del Jueves Santo: La Macarena, El Silencio, El Gran Poder, La Esperanza de Triana, Los Gitanos y El Calvario.
Estreno de Saiz Meneses
Todas las cofradías completaron su recorrido sin incidencias reseñables en materia de seguridad. Participando de esta pasión cofrade se pudo ver en las calles de Sevilla al arzobispo José Ángel Saiz Meneses, en su primera Semana Santa al frente de la archidiócesis, acompañando del nuncio vaticano, Bernardito Auza.
Ambos se encontraban en el ‘palquillo’ ubicado en la Campana, junto al presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla, Francisco Vélez. Entre las autoridades civiles, se encontraban el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; la ministra de Justicia, Pilar Llop, y el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz.