El próximo miércoles a las diez de la mañana tomará la palabra el cardenal Aquilino Bocos. El religioso claretiano lanzará una pregunta al aire con la que arrancará la 51ª Semana Nacional de Vida Consagrada. “¿Por qué es importante en el tema de la relación?”, interpelará Bocos a los asistentes a esta cita anual organizada por el Instituto Teológico de Vida Consagrada que este año se celebrará en el auditorio de la madrileña residencia Amor de Dios.
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Con las plazas de última hora disponibles para inscribirse, el encuentro tendrá en esta ocasión formato híbrido, es decir, tanto presencial como virtual. Bajo el lema ‘Somos relación, somos en relación’, a través de distintas ponencias y mesas redondas se buscará radiografiar y dar pistas sobre cómo vivir la consagración, entendida desde una experiencia de encuentro con Jesús, pero también con nosotros mismos, con los demás, con el tiempo y el espacio en el que nos movemos.
Mirada multidisplinar
A lo largo de cuatro días, se afrontarán estas cuestiones con una mirada multidisplinar, donde se alternarán las voces de religiosos de referencia, como el cardenal comboniano Miguel Ángel Ayuso, presidente del Pontificio Consejo de Diálogo Interreligioso, hasta José Carlos Bermejo, director del Centro de Humanización de la salud y Centro Asistencial San Camilo de Tres Cantos.
Teólogos, psicólogos, comunicadores… Unos y otros aportarán claves para aterrizar el desafío lanzado por ‘Gaudium et Spes’, desde el convencimiento de que la salvación tiene que llegar al “hombre todo entero, cuerpo y alma, corazón y conciencia, inteligencia y voluntad”.
Para el director del Instituto Teológico de Vida Religiosa, Antonio Bellella, “la Iglesia está haciendo hoy un serio esfuerzo para responder al interrogante sobre cómo deben ser sus relaciones ad intra y ad extra”. Desde esta perspectiva, considera que esta 51ª Semana Nacional de Vida Consagrada contribuirá a fortalecer estas relaciones dentro de la hoja de ruta marcada por el Papa Francisco que pasa por la sinodalidad.
