Francisco ha despejado hoy su agenda para someterse a un chequeo sanitario. Así lo ha explicado el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni. “El Papa ha frenado su actividad hoy a causa de controles médicos que son necesarios. Por eso, tiene la agenda vacía”, ha desvelado Bruni, después de que se hubiera especulado con un agravamiento en su dolor de rodilla.
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Sin embargo, no ha sido la dolencia la que ha roto los planes de Francisco, sino precisamente ponerle remedio a esa gonalgia aguda que sufre a causa del deterioro del cartílago y la artrosis.
Actividad limitada
Lo cierto es que en las últimas semanas, Jorge Mario Bergoglio ha visto limitada su actividad, como se pudo constatar durante las celebraciones del Triduo Pascual. Ya el Domingo de Ramos no tomó parte en la procesión de la Plaza de San Pedro, sino que espero al resto de concelebrantes en el altar. En la Vigilia Pascual declinó presidir la ceremonia y siguió la misa en primera fila. Eso sí, pronunció la homilía y bautizó a un grupo de catecúmenos.
Sí pudo estar al frente de la Misa de Pascua, así como de la bendición ‘Urbi et orbi’, aunque tuvo que sentarse en varios momentos. Sin embargo, el dolor de rodilla no pudo frenar el recorrido de Francisco por la plaza en papamóvil, en la primer acto multitudinario al aire libre en el Vaticano tras la pandemia.
