El cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado Vaticano, llamó a los fieles católicos mexicanos a ser misericordiosos y perdonar, pero sin cerrar los ojos ante las injusticias ni ante lo que está mal: “misericordia, amor, perdón, no es lo mismo que tratar de querer quedar bien con quienes buscan sus propios intereses personales, ideológicos o de grupo”.
- PODCAST: Una Pascua para desconfinarse (de verdad)
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
En el marco de su visita a México, que coincidió este domingo con la Fiesta de la Divina Misericordia, el Secretario de Estado Vaticano presidió la eucaristía en la Catedral Metropolitana de México, donde insistió en que tener misericordia no implica renunciar a la propia capacidad de análisis crítico ni de abstenerse de denunciar aquello que es injusto o dañino.
Se trata más bien –dijo Parolin- de mirar la realidad con corazón compasivo, “para colaborar, solidaria y valientemente, en el cambio hacia lo verdaderamente bueno para todos y para cada uno; en ello, Jesús resucitado y maestro, es nuestra guía”.
La humanidad no está encontrando la paz
Recordó a los fieles que en “nuestro camino nos acompaña la siempre Virgen Santa María de Guadalupe, madre de la esperanza y la misericordia. Que su intercesión nos alcance la gracia de abrirnos al don de la misericordia, que ella día a día nos ayude a confesar valientemente nuestra fe y a luchar por un México mejor y a mantener siempre viva la confianza y la esperanza en Jesucristo nuestro Señor”.
Pietro Parolin hizo referencia a santa Faustina, a quien Jesús le reveló que la humanidad no encontrará ni paz ni tranquilidad, “hasta que se vuelva con plena confianza a mi misericordia”.
“La humanidad -dijo el Secretario de Estado- no está encontrando precisamente ni tranquilidad ni paz por los muchos conflictos que hay en muchas partes del mundo, empezando por Ucrania”.
Cabe recordar que el Secretario de Estado Vaticano arribó a México el 21 de abril por la noche; el día 23 llegó a la localidad de Autlán, en el estado de Jalisco, donde presidió la ordenación episcopal de Javier Herrera Corona, nombrado por el Santo Padre como nuncio apostólico para República del Congo y Gabón.
Este 25 de abril el cardenal Parolin presidirá la misa en Basílica de Guadalupe, previo a la apertura Encuentro Eclesial de México, así como de la CXII Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano.