El nuncio en España, Bernardito Auza, alertó esta tarde de los riesgos que corre la educación cuando es “manipulada por intereses ideológicos o particulares”. El embajador vaticano fue el responsable de abrir el I Encuentro Iberoamericano de Profesores de Religión que se celebra esta tarde en Madrid. Este foro, que cuenta con más de mil congresistas -la mayoría online-, se complementará con actos culturales a lo largo del fin de semana, está organizado por Siena Educación, el editor del periódico Magisterio.
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En el acto de apertura, el diplomático filipino reconoció que “en la educación interviene el estado, pero a los padres les corresponde el papel primordial y principal”. Desde ahí, defendió el derecho de las familias a elegir “libremente” cómo educar a sus hijos. “La familia es la verdadera escuela de humanida”, sentenció.
Notable prestigio
Auza instó a los maestros de la asignatura a continuar trabajando con “ilusión, calidad y notable prestigio en la palestra educativa”. En este sentido defendió la existencia de la asignatura en tanto que “no solo contribuye al bien personal”, sino al trabajo por la justicia y la paz.
En este sentido, defendió que la materia confesional cumplirá con su misión “más auténtica y efectiva” en tanto que “forme humana y cristianamente”. “No basta con difundir conocimientos y valores, sino educar a los niños en cómo vivir en sociedad y respetar a los demás”, añadió.
Promover la unidad
Mariano Jabonero, secretario de la Organización de Estados Iberoamericanos, se sumó a la cita en conexión virtual, para alentar a los presentes a “promover la unidad a nuestros hijos y nuestro nietos”.
El presidente de la Fundación San Pablo CEU, Alfonso Bullón de Mendoza, señaló que Religión es “la asignatura más importante”, en tanto que “acerca a algo tan propio del hombre que nos diferencia de los animales, que es la espiritualidad”. “Tiene un contenido, no solo importante por su llamada a la salvación, sino para comprender el mundo en el que vives”, apostilló.
Redescubrir al hermano
El secretario general de la CIEC (Conferencia Interamericana de la Educación Católica), Óscar Pérez Sáyago, subrayó cómo el maestro en el aula está llamado a hacer descubrir a los niños y jóvenes a descubrir “donde está hoy tu hermano”. “Tenemos que dar claves de humanidad y de hermandad que nos hace falta”, defendió en medio de un contexto pandémico y bélico.
Desde Argentina, el presidente de Scholas Occurrentes, José María del Corral, recordó que el Papa es un convencido de que “si no cambiamos la educación, no podrán cambiar nuestras sociedades, nuestros países”. “Necesitamos profesores de humanidad y que hagan de la humanidad algo trascendente”, defendió.
Como director general de Siena Educación, José María de Moya, reivindicó la asignatura ante “el vacío existencial” de los alumnos en el marco actual. En esta línea, apuntó una visión integral de la educación “no desde una perspectiva religiosa o política, sino puramente pedagógica”.
