“Mi intención es empeñarme en la tarea de intentar cambiar la forma de concebir el mundo en el que vivimos todos y conseguir, así, la ‘amistad social’ a la que se refiere el papa Francisco”. Esta ha sido la declaración de intenciones de Cecilia Pilar Gracia, elegida nueva presidenta de Manos Unidas por la asamblea de la entidad que está reunida este fin de semana en Madrid.
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La nueva presidenta, extremeña y madre de dos hijos toma el relevo de Clara Pardo, ha sido elegida en la primera votación y estará en el cargo durante tres años. En el momento de la elección, que tiene que ser ratificada próximamente en el cargo por la Conferencia Episcopal Española, estaba presente el obispo Carlos Escribano, consiliario nacional de Manos Unidas y presidente de la Comisión Episcopal de Laicos, Familia y Vida.
Al servicio del desarrollo
Cecilia Pilar, según informan desde la entidad, es licenciada en Geografía e Historia por la Universidad de Complutense de Madrid, aunque profesionalmente se ha dedicado al mundo de la Comunicación y el Marketing. Desde 2010 era voluntaria en Manos Unidas, pasando por diferentes departamentos y áreas: participó en el Departamento de América, fue coordinadora del Festival de Clipmetrajes y actualmente era responsable del Área de Comunicación y Presencia Pública de la ONG.
La nueva presidenta se ha mostrado “muy afortunada y emocionada por la oportunidad de seguir trabajando, como ha hecho siempre Manos Unidas, por los más pobres de la tierra”. “Me pongo al servicio de esta gran familia para acompañar en su desarrollo a nuestros hermanos del Sur”, aseguró ante la asamblea. “Cecilia seguirá trabajando con el mismo espíritu de entrega de nuestras fundadoras, como ha demostrado en los años que lleva en la casa”, ha destacado Clara Pardo, la presidenta saliente.
