El papa Francisco invitó a los obispos latinoamericanos a “abundar en el camino de la sinodalidad“, destacando que esta realidad eclesiástica “echó raíces allí hace mucho tiempo”. El Santo Padre pidió a los pastores que eviten caer “en desviaciones”, como puede ser un “modo más o menos democrático, y mucho menos ‘populista’, de ser iglesia”.
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En un videomensaje dirigido a los miembros de la Pontificia Comisión para América Latina, el pontífice definió la sinodalidad como “un camino de comunión eclesial que busca abrir las mentes y los corazones a la voluntad del Espíritu Santo, no es una reorganización de las estructuras eclesiásticas”. Por ello, invitó a los prelados a promover una “verdadera sinodalidad”, advirtiendo que “la sinodalidad sin comunión puede convertirse en populismo eclesiástico”
Así, “La sinodalidad es la dimensión dinámica, la dimensión histórica de la comunión eclesial fundada en la comunión trinitaria, que, apreciando simultáneamente el ‘sensus fidei’ de todo el santo pueblo fiel de Dios, la colegialidad apostólica y la unidad con el Sucesor de Pedro, debe animar la conversión y la reforma de la iglesia a todos los niveles”, abundó Francisco.
“Mantener un pensamiento incompleto”
“Para poder hacer frente a los problemas pastorales y sociales de hoy, la Iglesia debe reaprender a caminar juntos“. Y, al hacerlo, “siempre es importante mantener un pensamiento incompleto“. Esto es así porque “el Espíritu Santo puede inspirar un verdadero cambio solo cuando nuestros pensamientos son incompletos; cuando son completos, no funciona”.
“Cuando alguien es un sabelotodo, el don no puede ser recibido. Cuando creemos que lo sabemos todo, el don no nos educa porque no puede entrar en nuestros corazones“, dijo. “En otras palabras, no hay nada más peligroso para la sinodalidad que pensar que lo sabemos todo, que lo entendemos todo, que lo controlamos todo”. Añadió, contundente: “Soy alérgico a los pensamientos ya completos y cerrados“.
