Con la intención de analizar la reforma educativa, el presidente de la Conferencia Episcopal del Paraguay, Adalberto Martínez Flores, nombrado recientemente para integrarse al Colegio Cardenalicio, se reunió con Gabriel Escobar, obispo del Vicariato Apostólico del Chaco y responsable de la Pastoral Educativa, y con el P. Jesús Montero Tirado, especialista en ámbito educativo y asesor de esta pastoral.
El año pasado, el ministro de Educación del Paraguay, había manifestado la intención de involucrar a los obispos paraguayos en su propósito de promover la transformación digital de la educación en el país. En esta línea, ahora, el obispo Escobar señaló que esta reunión tuvo como objetivo ver cuál es el aporte que pueden brindar a la educación del Paraguay, “justamente en estos tiempos en que se habla mucho de la transformación educativa 2030”.
El titular del Vicariato del Chaco aseguró que es necesario abogar por los elementos primordiales de todo proceso educativo: el valor de la vida, de la libertad, de la justicia y de la paz.
Indicó que, teniendo en cuenta que el próximo 7 de junio se celebra el día de la Educación Católica, se han puesto de acuerdo para publicar una carta en donde se destaca la contribución que brinda la escuela católica a la educación nacional del país.
Aseguró que como Iglesia se comprometerán, a través de un escrito, a trabajar por la defensa de la vida, de la familia y por aquellos valores y principios cristianos necesarios y fundamentales para la construcción de la transformación educativa que necesita el país.
En el comunicado, la Iglesia paraguaya aseguró que el presidente de la CEP, el cardenal electo Martínez Flores, agradeció la visita de los responsables del área educativa y reflejó su agrado ante los proyectos educativos que impulsa la Iglesia.