La pregunta surgió de inmediato. ¿Cáritas haciendo un musical? “Choca. No es habitual y nos dimos cuenta a medida que lo íbamos contando, por ejemplo, para buscar patrocinadores, porque nos parecía importante el apoyo económico a este proyecto, que puede ser de mil maneras, desde comprar entradas a donativos, porque todo aquello que se recaude, por supuesto, va a los proyectos sociales”, responde Maite Quintana, secretaria general de Cáritas Pamplona-Tudela y quien ha liderado el proyecto.
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El musical es No amanecerá sin ti, basado en Los miserables, la novela de Victor Hugo, que produce Cáritas Pamplona-Tudela junto a la compañía Ópera de Cámara de Navarra. “Es un musical, pero es más que un musical”, afirma Quintana. “Comenzamos a darnos cuenta y a comprender que era un proyecto de lo más innovador”, prosigue sobre esta iniciativa inclusiva y transformadora.
Y, de hecho, añade: “A través de un espacio tan sencillo de cultura, donde todos estamos haciendo algo, aprendiendo y divirtiéndonos, construyendo algo para un proyecto y un objetivo común, la relación con la gente que se había generado era muy diferente a la del día a día”.
El testimonio de Maite lo deja claro: “Podemos dar un mensaje y una imagen diferentes de Cáritas, porque tenemos en el imaginario que Cáritas ayuda y está con los más desfavorecidos, que da ropa, alimentos, pero también posibilitamos espacios de estima personal, de crecimiento”. Habrá a quien le pueda extrañar, pero –como repite la secretaria general de Cáritas Pamplona-Tudela y también incluye el cartel– “la cultura transforma personas”.
El proyecto nació para celebrar el 75º aniversario de Cáritas Española. “Hace más de dos años que comenzamos a trabajar sobre ideas. Junto a la empresa externa que nos lleva la comunicación, Doña Remedios Comunicación Creativa, hablamos de hacer algún tipo de concierto, pero, sobre todo, queríamos algo que mostrase a Cáritas, y no queríamos un musical en plan actividad benéfico-social en la que se recoge sin más”, relata Quintana. Surgió entonces la posibilidad de trabajar junto a la Ópera de Cámara de Navarra.
“Ellos están acostumbrados a trabajar con niños y también con personas en dificultades, y buscan acercar la música al gran público. A partir de ahí, me dije: ‘Me cuadra, podríamos meter a nuestra gente en algo así’”, detalla. Fue la propia Ópera de Cámara de Navarra la que propuso Los miserables. “Tiene valores comunes a nosotros, como son las segundas oportunidades, los prejuicios, la confianza, la justicia social, el tema de encasillar a las personas –describe Quintana–. Son temas eternos, que nos parecen válidos para cualquier tiempo”.
Romper con los roles
La pandemia vivida detuvo la producción. “El año pasado empezamos a plantearnos la posibilidad de recuperar el proyecto y lo reenfocamos para fomentar la participación, no solamente de personas usuarias, sino también de voluntarias, contratadas”, manifiesta sobre este desafío de “romper con los roles y trabajar en pie de igualdad”. Vestuario, maquillaje y atrezo dependen de Cáritas, y se han creado a través de cuatro talleres impartidos por profesionales de la Ópera de Cámara de Navarra con la ayuda de una “embajadora” de Cáritas.
Lo mismo que el coro, formado únicamente por usuarios, voluntarios y personal contratado de Cáritas. Los solistas son cantantes habituales en las producciones líricas de la Ópera de Cámara de Navarra y contará con la interpretación de la Orquesta Sinfónica de Navarra.