El cardenal Marc Ouellet, presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, envió un mensaje al provincial de la Compañía de Jesús en México, Luis Gerardo Moro Madrid, para expresarle su solidaridad tras el asesinato de dos sacerdotes jesuitas en el estado de Chihuahua.
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El pasado 20 de junio, los sacerdotes Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar fueron asesinados dentro de una iglesia de la comunidad de Cerocahui, Chihuahua, al proteger la vida de un guía de turistas que había llegado al templo en busca de refugio, pues era perseguido por una persona armada.
Al destacar este hecho, el cardenal Ouellet recordó en su misiva que es justo la entrega radical de la propia vida como se siembran las semillas de una nueva sociedad reconciliada.
“En nuestra Pontificia Comisión –añadió– estamos particularmente conscientes de que este trágico evento se encuentra enmarcado en el contexto de toda una atmósfera de violencia que desde hace años flagela a la nación mexicana y en la que muchas víctimas inocentes siembran con su sangre una silenciosa protesta que clama al cielo”.
El cardenal canadiense de 78 años aprovechó su mensaje a la Compañía de Jesús para denunciar la violencia no solo en México sino también en muchos otros países de América Latina, y pedir a la Virgen de Guadalupe su intercesión:
“Nos unimos de corazón en oración a la Compañía de Jesús y a la comunidad de Cerocahui, implorando a la Santísima Virgen su poderosa intercesión para que, así como ella en el siglo XVI colaboró a sanar las heridas de la naciente nación mexicana, hoy vuelva a hacer el milagro de restaurar la paz, con justicia y dignidad para todos, en especial para los hermanos que han sido víctimas de la violencia en los últimos años”.
Se busca al presunto responsable
Cabe destacar que este jueves, una comitiva de la Compañía de Jesús acudirán a reconocer los cuerpos de los dos sacerdotes asesinados, luego de que ayer la gobernadora del estado de Chihuahua diera a conocer que habían sido encontrados, pues el grupo criminal que atentó contra la vida de los religiosos se los llevó pese a la súplica de un sacerdote que pedía que no los movieran de la iglesia.
Por estos hechos ya se busca al presunto responsable, José Noriel Portillo, apodado ‘El chueco’, supuesto líder del Cártel de Sinaloa en Urique, Chihuahua, por lo que el Instituto Nacional de Migración emitió una alerta migratoria para evitar que salga por alguno de los casi 200 puntos fronterizos del país.
