La Asamblea general extraordinaria del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño finalizó este 14 de julio con un mensaje al papa Francisco en el que han agradecido la cercanía.
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Los obispos del Celam han expresado una vez más al Santo Padre su compromiso eclesial, “nuestra seria y madura adhesión filial y nuestro empeño por ser, cada vez más, una Iglesia de comunión, participación y misión permanente”.
Al respecto, destacaron que durante los tres días de trabajo, iniciados el 12 de julio, ha configurado una agenda para “reafirmarnos en el camino misionero y hacer realidad el deseo y el compromiso de la gran misión”.
Iluminar la vida de los pueblos
Los prelados señalan que a pesar de las vicisitudes como las crisis políticas, pobreza y destrucción de la casa común, se siente interpelados por la realidad para responder “llenos de esperanza, iluminar e inspirar la vida de nuestros pueblos con las vigentes propuestas del Documento de Aparecida y la rica experiencia de la reciente Asamblea Eclesial”.
“El rostro de la Iglesia latinoamericana y caribeña, delineado en tantos hermanos y hermanas al servicio del anuncio del Reino, revela las marcas de las diversas preocupaciones y sufrimientos que nos afligen, convenciéndonos de la importancia y urgencia de la sinodalidad de la Iglesia”, acotaron.
Por tanto, “siguiendo los pasos del proceso del Sínodo y comenzando la fase continental, creemos que seremos fecundados y fortalecidos por la mística y la profecía que de allí manan, revitalizando a nuestra Iglesia como servidora ejemplar”.
Hacia una mejor política
Por supuesto, apuntan hacia “opciones políticas con los principios de la mejor política, marcando nuestras sociedades con el sabor del Evangelio en camino al Reino definitivo”.
“Santo Padre: denos su bendición para que podamos llevar adelante nuestros propósitos de crecimiento misionero, enfrentar los desafíos y proponer los caminos de Dios, como Iglesia al servicio de la vida plena para nuestros pueblos”, finalizaron.
Foto: Celam
