Las diócesis han expresado su preocupación por la evolución de la situación, que ya ha dejado fallecidos y miles de desplazados
Los incendios continúan arrasando España este lunes con un fuego alimentado por las altas temperaturas que ha traído la ola de calor que dura ya más de una semana. Así, Extremadura, Cataluña, Galicia y Castilla y León ven estos días como miles de hectáreas arden y cientos de personas deben ser desplazadas de sus hogares.
Ante esta situación, la Iglesia ha mostrado su preocupación, como es el caso de la diócesis de la delegación episcopal para la Ecología Integral de la diócesis de Mérida-Badajoz, una de las zonas más afectadas, que ha hecho público un comunicado.
En él se recuerda que “no somos dueños del mundo, sino administradores de la fabulosa obra de Dios Padre”, y que, por lo tanto, estos incendios, sequía, cosechas dañadas… son una muestra de que “hemos sido administradores negligentes”.
El delegado José Moreno Losada apunta así a varios “factores que inciden en la creciente fragilidad de nuestro medio ambiente”, como “el abandono del mundo rural”, y hace un llamamiento “a todos para entender que los recursos naturales son un gran tesoro a cuidar”, como apunta el papa Francisco en Laudato si, Querida Amazonía y Fratelli Tutti.
Asimismo, la diócesis de Ávila ha expresado su preocupación en diversos mensajes a través de Twitter. En uno de ellos, encomienda a la Virgen de Valsordo a los cebrereños y “a cuantos combaten sin descanso contra el voraz incendio”.
Por otro lado, desde la Iglesia de Zamora han expresado, también en Twitter, su pesar por el fallecimiento del brigadista Daniel Gullón en la extinción del incendio originado en Losacio. “Descanse en Paz, descanse en Dios. Al mismo tiempo rezamos por el resto de los heridos y su pronta recuperación”, añade la diócesis.
Por último, la diócesis de Coria-Cáceres ha señalado en la misma red social que sigue atentamente el progreso de “todos los incendios de nuestra región, Monfragüe, Hurdes, y Sierra de Gata”. Además, han expresado su “ánimo a todos los desplazados y a todos los que luchan contra los incendios”