Este fin de semana el obispo de Torreón, Luis Martín Barraza Beltrán, presidió la misa de cuerpo presente por el fallecimiento de José Guadalupe Galván Galindo, ‘monseñor Lupito’, emérito de Torreón, quien murió la noche del 16 de julio a los 80 años de edad.
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Al concluir la celebración eucarística en la parroquia de San José de esa ciudad, ubicada en el estado de Coahuila, los fieles se despidieron del obispo emérito, a quien la comunidad diocesana podrá dar el último adiós durante varios días, hasta el próximo martes 19 cuando será trasladado en procesión a la catedral de Nuestra Señora del Carmen, donde se realizará la sepultura.
La Conferencia del Episcopado Mexicano dio sus condolencias a los familiares, amigos y fieles a los que sirvió en vida como pastor ‘monseñor Lupito’, y rogó “a nuestro Señor Jesucristo, lo reciba y premie con su Reino, por su generoso servicio y entrega pastoral en bien del pueblo encomendado”.
¿Quién fue José Guadalupe Galván Galindo?
Don José Guadalupe Galván Galindo nació el 21 de agosto de 1941 en Cadereyta de Jiménez, estado de Nuevo León. El 8 de septiembre de 1954 ingresó al Seminario de Monterrey, donde estudió cuatro años de Humanidades y tres de Filosofía. En el mes de septiembre de 1961 pasó al Seminario Pontificio de Nuestra Señora de Guadalupe en Moctezuma, Nuevo México, Estados Unidos, donde cursó cuatro años de Teología.
El 29 de junio de 1965 recibió la Ordenación Sacerdotal en la Basílica del Roble, en Monterrey. Una vez Ordenado Presbítero, el padre ‘Lupito’ presidió su primera Eucaristía Solemne en su ciudad natal. En el mes de julio de 1965, para comenzar su ministerio presbiteral fue nombrado Vicario Parroquial en el Sagrado Corazón de la ciudad de Monterrey, servicio que desempeñó por nueve años.
En la arquidiócesis de Monterrey colaboró en la construcción de la Casa Sacerdotal y en su administración. También fue integrante de la Comisión del Clero y fue responsable diocesano de la prevención social de todos los sacerdotes de la arquidiócesis. Además desempeñó el servicio de Presidente de la Comisión Diocesana de Liturgia y Ceremoniero oficial de la Arquidiócesis de Monterrey.
Designado obispo de Torreón en el año 2000
Entre otros servicios importantes está el de párroco del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, en Monterrey, y responsable de la construcción de la nueva Basílica en Monterrey, además de la restauración del antiguo Santuario para la visita del papa Juan Pablo II, quien en 1983 lo nombró Prelado Honorario, recibiendo el título de Monseñor.
El 8 de julio de 1994 el papa Juan Pablo II lo nombró V Obispo de la Diócesis de Ciudad Valles en San Luis Potosí, donde sirvió por seis años, recibiendo su consagración Episcopal el 10 de agosto del mismo año, de manos de Girolamo Prigione, teniendo como co-consagrantes al cardenal Adolfo Suarez Rivera y Monseñor Juvencio González Alvarez.
Posteriormente fue designado tercer obispo de la Diócesis de Torreón, de la que tomó posesión el 14 de diciembre del año 2000, Iglesia a la cual sirvió como su pastor hasta septiembre del 2017 que le fue aceptada su renuncia por edad.