La arquidiócesis de México y Monterrey manifestaron su preocupación ante la falta de agua que sufre el país. Y es que recientemente la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales lanzaron una alerta pues en diversas cuencas del país la sequía ha alcanzado las clasificaciones de “severa, extrema o excepcional”.
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De acuerdo con datos oficiales, 11 de los 32 estados de México enfrentan la emergencia; en particular, más del 70% de los municipios a lo largo y ancho del país se encuentran afectados por esta situación.
En el caso de la arquidiócesis de México, cuyo arzobispo es el cardenal Carlos Aguiar Retes, expresó su postura respecto a la emergencia en un artículo editorial publicado en su revista diocesana ‘Desde la fe’.
La arquidiócesis primada de México hizo un llamado a la sociedad civil a cuidar el agua, mientras que pidió a las autoridades distribuir equitativamente el agua y tomar acciones concretas para un correcto aprovechamiento del agua.
Para esta Iglesia local, lo que está ocurriendo, sobre todo en el norte de México, “debe servir a ciudadanos y gobiernos como una señal para cuidar nuestros recursos naturales y actuar antes de que sea demasiado tarde”.
“Dios nos conceda lluvia abundante”
Por su parte, el arzobispo de Monterrey y presidente del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera, hizo un llamado a ser solidarios, “particularmente ante la crisis del agua, que cada vez es más grande. Bien sabemos que las autoridades están buscando soluciones, unámonos a esta causa y no permitamos que la desinformación nos nuble la visión de fraternidad que debemos vivir”.
El arzobispo Cabrera también hizo un llamado a las autoridades para que resuelvan esta crisis del agua “en diálogo, aunque todo parezca muy lento; las comunidades tienen que saber escuchar las necesidades para que el daño social y el daño ecológico sea menos grave; estamos en una crisis en la que todos debemos ayudarnos”.
Finalmente, pidió buscar lo que realmente es importante “para que todos, en unidad auténtica, podamos hacer un uso responsable de los bienes naturales para bien de nuestras familias y de todos los integrantes de la sociedad. No dejen de rezar para que Dios nos conceda lluvia abundante, paz y tranquilidad en nuestro estado y nuestro país”.
