La Iglesia canadiense quiere recibir el próximo domingo al Papa con algunos deberes hechos. O, al menos, encaminados. De ahí que, en las vísperas de lo que el propio Francisco ha denominado como una peregrinación penitencial, los obispos hayan dado a conoce que ya han recaudado 4,6 millones de dólares para indemnizar a los indígenas.
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Y es que, el motivo central de este viaje a Edmonton, Maskwacis, Quebec e Iqaluit es pedir perdón por las discriminaciones y vejaciones sufridas por los pueblos originarios, desde 1880 hasta las últimas décadas del siglo XX, especialmente en los internados católicos.
Sanación y reconciliación
Tal y como expone la Conferencia Canadiense de Obispos Católicos, la llamada Junta Directiva del Fondo de Reconciliación Indígena ya ha comenzado a repartir las primeras partidas a diferentes proyectos de sanación y reconciliación, que estarían centrados en tres entidades: First Nations, Métis and Inuit Peoples.
El visto bueno a estas iniciativas se habría dado el pasado 15 de julio. Y solo sería el inicio de los 30 millones de dólares que se han comprometido a recaudar y distribuir en los próximos cinco años.
Estamos satisfechos con el progreso realizado hasta la fecha y esperamos distribuir los fondos lo más rápido posible para apoyar los proyectos de reconciliación en todo el país”, expone Wilton Littlechild, indígena y presidente de la Junta. “, expone. “Es nuestra sincera esperanza ayudar al fondo a promover significativamente la sanación entre la Iglesia Católica y los Pueblos Indígenas”, apoya el obispo William McGrattan, vicepresidente del Episcopado canadiense.
