El arzobispo William Lori y el cardenal Timothy Dolan aseguran que se trata del proyecto de ley “más injusto y extremo” que el país jamás haya visto
Los obispos de Estados Unidos expresaron su rechazo a la aprobación, en la Cámara de Representantes, de la ‘Ley de Protección de la Salud de la Mujer, HR 8296’, que, de ser aprobada por el Senado, impondría ‘el aborto a pedido’ en el país en cualquier etapa del embarazo.
Esta iniciativa de ley -aprobada por 219 votos del Partido Demócrata- busca eliminar además las leyes pro-vida en cada nivel de gobierno, incluida la notificación a los padres de las niñas menores, el consentimiento informado y las protecciones de salud y seguridad específicas que deben regir las instalaciones donde se practica el aborto.
La HR 8296 también implica que todos los estadounidenses apoyen el aborto tanto en el país como en el extranjero con el dinero de sus impuestos, y también obligaría a los proveedores y profesionales de la salud a realizar, asistir y/o colaborar en un aborto en contra de sus creencias, así como también a los empleadores y aseguradoras para cubrir o pagar el aborto.
En ese sentido, el arzobispo de Baltimore y presidente del Comité de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), William E. Lori y el arzobispo de Nueva York y presidente del Comité de Libertad Religiosa de la USCCB, el cardenal Timothy M. Dolan calificaron el proyecto de ley como el “más injusto y extremo que nuestra nación jamás haya visto”.
Para los arzobispos, el querer responder a las necesidades de las mujeres mediante la promoción del aborto electivo y financiado por los contribuyentes, como lo haría este proyecto de ley, “es un mal grave y una falta de amor y servicio a las mujeres“.
“Ofrecer abortos gratuitos o de bajo costo, en lugar de aumentar los recursos que las mujeres necesitan para cuidar de sí mismas y de sus hijos, no es una ‘elección’ sino una coerción y un abandono insensible. Simplemente repetir la mentira de que el aborto es atención médica no lo convierte en tal. Terminar deliberadamente con la vida de seres humanos indefensos y sin voz es la antítesis de la atención médica“, argumentaron.
Lori y Dolan pidieron “a quienes ven en el aborto una ‘solución’ legítima a las necesidades de las mujeres, que abandonen este camino de muerte y desesperación. En cambio, invitamos a todos a unirse a nosotros en la búsqueda de la visión que presentamos en ‘Standing with moms in need‘”.
Dicho programa -explicaron- defiende la verdad de que toda vida humana es sagrada e inviolable, pues “una sociedad en la que existe la protección legal de la vida humana va acompañada de profundo cuidado de las madres y sus hijos”.
Finalmente, exhortaron a que se priorice el bienestar de las mujeres, los niños y las familias, tanto con recursos materiales como con acompañamiento personal, para que ninguna mujer se sienta obligada a elegir entre su futuro y la vida de su hijo.