Con una declaración conjunta, empresarios y ejecutivos cristianos de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) y la Dirección de Relaciones Corporativas e Institucionales de ACIERA, se dirigieron a funcionarios y referentes empresariales, sindicales, sociales y del ámbito político, para reflexionar ante la situación crítica que vive la sociedad.
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“Entendemos que silenciar nuestro sentir y pensar ante la situación que vive nuestra sociedad sería una cobarde actitud“, expresaron las organizaciones.
Las crisis en el país
Asimismo, señalaron que los argentinos tienen experiencia en crisis ya que a lo largo de los años aprendieron cómo se originan, se desarrollan y las duras consecuencias que dejan, con familias cada vez más pobres y desamparadas, sin posibilidad de retorno.
Otro tema que puntualizaron fue el relativo a la inflación: “es un mecanismo nocivo y perverso que deberíamos erradicar para siempre porque hiere la dignidad de la persona, destruye la convivencia y favorece la desigualdad”, aseguraron.
Reflexión y diálogo
Para la búsqueda de soluciones, a veces conocidas, pero no implementadas por falta de acuerdo y voluntad, ACDE y ACIERA invitaron a la reflexión y al diálogo.
Aseguraron que “cuando se empiezan a buscar culpables y se amenazan a los actores de la economía, se pierde la confianza mutua”. Para ellos este costo lo pagará la sociedad con más pobreza y marginación.
Luego, detallaron una serie de solicitudes, a los distintos referentes de los distintos ámbitos:
- Al Gobierno le pidieron tomar decisiones para brindar certidumbre a los actores económicos.
- Ante la gravedad de la situación, solicitaron a la oposición que no especule con beneficios electorales ni que ceda a la tentación de la venganza.
- A los responsables de los organismos del Estado (Justicia, Seguridad, Salud, Educación, Provincias, Municipios), que estén a la altura de la responsabilidad conferida.
- Responsabilidad y mesura fue el reclamo hacia los dirigentes sociales y sindicales, con el fin de evitar males mayores de sus propios representados.
- Al mundo empresarial les han solicitado a cumplir con su deber, evitar sacar beneficio de la desgracia generalizada y caer en atajos y en prácticas facilistas reñidas con la ética profesional.
- Convocaron a todos los compatriotas a no caer en expresiones dramáticas ni pesimistas que alejan las soluciones pacíficas, y que no pierdan las esperanzas.
Finalmente, los empresarios cristianos afirmaron que “La Nación necesita de cada uno de nosotros, pero también, como sociedad necesitamos de nuestros líderes el respeto por la verdad y la ejemplaridad de sus conductas”.
Y concluyeron pidieron dar un primer paso necesario para este cometido que respetar la Constitución Nacional en su letra y en su espíritu.
