“Vivimos tiempos exigentes en términos eclesiásticos”, ha señalado el Consejo Presbiteral del Patriarcado de Lisboa después de que el cardenal fuera acusado de encubrir un caso
El Consejo Presbiteral del Patriarcado de Lisboa ha compartido un comunicado en el que muestra su apoyo al cardenal-patriarca Manuel Clemente después de que una investigación periodística hecha pública la pasada semana afirmase que habría encubierto un caso de abusos ocurrido en la década de 1990.
“Vivimos tiempos exigentes en términos eclesiásticos”, dicen los prelados, quienes reconocen que, “semana tras semana, hay denuncias de abusos sexuales en la Iglesia en Portugal. Algunos son casos que ya han sido investigados, otros que ya han sido juzgados; algunos condenados, otros archivados”.
De esta manera, el Consejo Presbiteral lamenta que “en vez de sensibilizar sobre el problema de los abusos sexuales en la Iglesia y llevar a un debate serio sobre el clericalismo, la dinámica mediática convierte todo en un ‘caso más'”.
“Estamos en un camino de conversión para que crímenes como estos no vuelvan a encubrirse y que, en el futuro, preventivamente, se haga todo lo posible para que no se repitan”, aseguran los obispos a la vez que confirman que, en este proceso, desean “contar con nuestro Patriarca, el cardenal Manuel Clemente, como hemos contado hasta ahora. Para que, en comunión con él, nos anime a ir más allá en el servicio del Pueblo que nos ha sido confiado y en la búsqueda de la verdad y la justicia que conlleva el anuncio del Evangelio”.
Por su parte, Clemente se ha defendido con una carta abierta en la que subraya que, si bien las noticias que apuntaban a su inacción y falta de colaboración con las autoridades judiciales y civiles, la realidad es que se había reunido con la víctima años después de que el sacerdote en cuestión se hubiera apartado de la parroquia. Sin embargo, Clemente “no entendió” esta reunión como “una nueva denuncia realizada en 1999”.