Roma tendrá 28 días, a partir del 26 de julio, para abonar dicha cantidad
La Justicia de Reino Unido ha condenado al Estado de la Ciudad del Vaticano al pago de 200.000 libras por el caso del edificio de Sloane Avenue (Londres), el cual desató el Vatileaks 3 y sentó por primera vez en el banquillo de los acusados a un cardenal: el ex prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, Angelo Becciu.
Así, los tribunales ingleses han impuesto esta multa, de ejecución inmediata, al Vaticano, debido a la falta de “neutralidad” en la investigación del caso. Roma tendrá 28 días, a partir del 26 de julio, para abonar dicha cantidad.
El Vaticano vendió el pasado mes de julio este edificio por el que diez personas, incluido el cardenal Angelo Becciu, están sentados en el banquillo de los acusados en el macro juicio económico vaticano imputados por malversación y fraude en el uso de los fondos reservados. La Administración del Patrimonio de la Santa Sede (APSA) informaba, en este sentido, de que el inmueble se ha vendido “en los últimos días” por 215 millones de euros, cuando costó 350 millones.
Sin embargo, aún quedaría otro asunto pendiente con los tribunales ingleses, ya que Raffaele Mincione, el financiero de la Secretaría de Estado de la Santa Sede que impulsó la adquisición del edificio del 60 Sloane Avenue y que después utilizó el dinero en inversiones opacas, ha denunciado a la Santa Sede ya que defiende que el Vaticano no puede demostrar sus acusaciones contra él y quiere iniciar una acción civil en el Reino Unido para, tal como subrayan los medios ingleses, proteger su reputación.