El obispo de Mérida-Badajoz, Celso Morga, se ha unido a las diversas voces que, desde dentro de la Iglesia, han expresado su “dolor” sobre la nueva ley del aborto en nuestro país. Y lo ha hecho a través de la revista diocesana ‘Iglesia en camino’, en un artículo titulado ‘Aborto’.
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“Por mi ministerio sacerdotal”, reconoce el obispo, “sé que el aborto queda en la conciencia de los progenitores, muy en particular de la madre, como un peso imposible o muy difícil de cancelar. Queda y permanece por muchos años, incluso después de insistir en el perdón ya obtenido de Dios”. Así, reflexiona acerca de esa “voz de la conciencia” como “juicio de la razón humana por el que toda persona aplica a un acto concreto suyo la ley inmutable, eterna y universal que nos ordena hacer el bien y evitar el mal”.
En este sentido, el aborto no es “solamente una cuestión religiosa, para los que creen en Dios”, sino que “esa voz es universal, está en todos y no es fruto de la cultura, aunque el juicio moral de la conciencia pueda ser menos seguro en muchos casos y la decisión difícil a causa de la ignorancia, de la educación recibida, del ambiente social, etc.”.
Apoyar a las madres
Asimismo, Morga ha subrayado que la Iglesia, si bien “defiende y defenderá la sacralidad de la vida humana desde el inicio”, no es “insensible sino al revés, muy consciente y sensible al drama personal y familiar que se cierne sobre los progenitores, muy en particular sobre la mujer, cuando dar a luz la criatura que lleva en su seno aparece ante sus ojos como un peso insoportable de sobrellevar por causas objetivas y subjetivas muy graves”.
Por ello, el obispo ha pedido que se apoye “con leyes y cuidado familiar y social a esas futuras madres”. “Ciertamente es una cuestión muy difícil y compleja pero la solución no puede ser el aborto y mucho menos su liberalización cada vez más y más pronunciada”, ha aseverado.
“Entiendo que debe ser una situación extremadamente difícil y compleja aquella en la que os encontráis muchas mujeres cuando no os veis capaces de llevar adelante vuestro embarazo”, ha reconocido el prelado, invitando a las mujeres a dejarse “acompañar e iluminar antes de tomar una decisión definitiva”. “Desde luego, sabed que contáis con el apoyo y la oración de la Iglesia”, ha concluido.