Para el considerado como el mayor especialista en prevención de blanqueo de capitales en nuestro país, Miguel Ángel Recio, “las fundaciones y asociaciones religiosas, por la bondad de sus objetivos, pueden ser utilizadas para blanquear. Algunos, porque nos ven íntegros y honestos, nos pueden usar”.
“Frente a ello, hoy por hoy, ya nadie puede decir que yo no sabía nada, tenemos una responsabilidad. Podemos participar en un entramado sin quererlo”, alertó el especialista financiero esta tarde como ponente de clausura de la actual edición del curso para Asesores de Instituciones Religiosas promovido conjuntamente entre Banco Sabadell con la Universidad Francisco de Vitoria.
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El acto tuvo lugar en el auditorio madrileño de Banco Sabadell y concluyó con la entrega de diplomas de los últimos matriculados en esta apuesta formativa completamente interactiva que busca ofrecer un conocimiento integrado sobre cuestiones como la gestión del patrimonio financiero, compliance…
Prevenir riesgos
“Sean honestos, trabajen con integridad”, fue la recomendación que dio a los agentes eclesiales presentes en la sala, a quienes aconsejó guiarse por esta máxima a la hora de realizar cualquier operación financiera para evitar situaciones delictivas: “Conoce a tu cliente y conoce el origen de sus fondos, con eso están salvados el 90 por ciento de los riesgos”. “En España tenemos un sistema que nos permite actuar con seguridad”, añadió.
Santiago Portas, director de Instituciones Religiosas de Banco Sabadell y director académico del curso, revalidó el compromiso de la entidad con “un proyecto donde los protagonistas son los alumnos, porque vuestra formación va a repercutir en vuestras instituciones”. De hecho, en este otoño arranca la tercera edición de este ciclo formativo por el que ya han pasado más de 800 personas. “Es una formación desde y para la Iglesia y las entidades del tercer sector, no es un acto lucrativo”, añadió.
Por su parte el director de la Escuela Postgrado y Formación Permanente de la Universidad Francisco de Vitoria, Félix Suárez, expuso que “la Iglesia es un bien que tiene la sociedad en tanto que todo lo que tiene lo pone a su servicio, sea en el entorno asistencial, educativo o esencialmente evangelizador”.
Mejorar la sociedad
En esta misma línea, subrayó que “la mejor forma de mejorar la sociedad, para que sea más justa desde el humanismo cristiano es mejorar las instituciones y mejorar a las personas que forman esas instituciones”.
Por ello, subrayó como el curso promovido de la mano de Banco Sabadell busca que los agentes eclesiales, de religiosos a laicos, pasando por sacerdotes, “sean plenamente capaces para afrontar cualquier negociación en un contexto complejo como el que estamos viviendo”.
