El Papa ha recibido hoy a los participantes en la reunión de Deloitte Global
Este jueves, el papa Francisco ha recibido en audiencia, en el Aula Pablo VI, a los participantes en la reunión de la asesoría Deloitte Global. Una ocasión, ante una empresa con miles de trabajadores, en la que el Papa ha aprovechado para recordar que “la humanidad está globalizada e interconectada, pero la pobreza, la injusticia y la desigualdad permanecen”.
Ante ello, el Papa ha hecho a los asistentes “tres sugerencias para revertir el rumbo” que ha tomado el mundo: tomar conciencia de que se puede dejar huella; asumir y ejercer la propia responsabilidad cultural, siendo coherentes con la visión evangélica de la economía y la sociedad; y potenciar la diversidad.
“¿Qué puede hacer el consultor de decisiones en este entorno difícil e incierto?”, ha preguntado Francisco. “Puede hacer mucho. Puede fijar sus análisis y propuestas de acuerdo a una mirada y visión integral: en efecto, el trabajo digno de las personas, el cuidado de la casa común, el valor económico y social, el impacto positivo en las comunidades son realidades conectadas entre sí”.
Asimismo, “el consultor de hoy, consciente de su papel, está llamado a proponer y discutir nuevos rumbos para nuevos desafíos”, ya que “los viejos esquemas funcionaron solo parcialmente, en diferentes contextos”.
“Mi esperanza es que pueda ayudar a las organizaciones a responder a este llamado. Tienes las competencias adecuadas para colaborar en la construcción de ese puente necesario entre el paradigma económico actual, basado en el consumo excesivo y que vive su última fase, con el paradigma emergente, un paradigma estructurado sobre inclusión, sobriedad, cuidado y bienestar”, ha concluido. “Os animo a convertiros en ‘consultores integrales’: a cooperar en la reorientación del modo de ser en este planeta nuestro que hemos enfermado, en el clima y en las desigualdades”.