El pasado 20 de septiembre, los obispos flamencos anunciaban la publicación del documento ‘Estar cerca de los homosexuales desde el punto de vista pastoral. Por una Iglesia acogedora que no excluya a nadie’. A través de él, recogía la liturgia para bendecir uniones de parejas homosexuales. Esta semana, los prelados han acudido al Vaticano para la visita ad limina, ocasión que ha servido a Johan Bonny, obispo de Amberes y observador del camino sinodal, para hablar sobre este tema con el Papa.
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“Ahora sé lo que piensa Francisco al respecto”, ha señalado Bonny a Katholisch. Algo que, reconoce, es “lo más importante” para él. “Sé que nuestra guía publicada recientemente sobre la bendición de las parejas homosexuales está alineada con el papa Francisco”, asegura. “Es la responsabilidad personal que el Papa nos ha dado a los obispos y que él también apoya. Sin embargo, los mismos temas no tienen por qué y no pueden ser discutidos en todo el mundo en todo momento”, ha aseverado el prelado.
Ritmos diferentes
Bonny, que desde 2015 ha mostrado abiertamente su apoyo a estas bendiciones a parejas homosexuales, subraya que “este tema también fue silenciado durante mucho tiempo y barrido debajo de la alfombra”. Sin embargo, en Europa occidental, “ahora se está poniendo sobre la mesa, también por parte de la sociedad en su conjunto”.
“Sin embargo, esto todavía no está sucediendo en todo el mundo“, ha reconocido el obispo. “Este ritmo diferente debido a las diferentes tradiciones morales-teológicas que se utilizan para argumentar”. Sin embargo, “estas tradiciones están sujetas a cambios, pero tales procesos no están libres de tensión”.