El obispo de San Carlos de Bariloche, Juan José Chaparro cmf, junto a Narciso Weiss, pastor de la Iglesia Evangélica Luterana Unida y la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, y a Maximiliano A. Heusser, superintendente del Distrito Cordillera de la Iglesia Evangélica Metodista Argentina, emitieron un comunicado en la que manifiestan su preocupación ante la situación que se vive en Villa Mascardi (provincia de Río Negro) con la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu.
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Manifestaron que estos hechos ponen en evidencia, tanto las dificultades de las autoridades para establecer el diálogo entre las partes que lleven a la resolución de conflictos, como las de los Estados nacional y provincial para cumplir con las leyes que propiciarían la resolución de esta y tantas comunidades originarias del país.
Creen indispensable realizar, a la brevedad posible, el relevamiento territorial que fija la Ley 26.160, prorrogada constantemente. También abogaron por el el cumplimiento de la Constitución Nacional en su artículo 75, inciso 17, que establece el reconocimiento de las comunidades indígenas, y el otorgamiento de tierras aptas y suficientes para su desarrollo.
Atender los reclamos
Los referentes religiosos indicaron que la violencia en los reclamos no es acertada, pero tampoco lo es la violencia estatal que no brinda soluciones en tiempo y forma y que desoye los reclamos de las comunidades.
Asimismo, como personas de fe, advirtieron que en medio nuestro se establecen los males del racismo, la xenofobia y el prejuicio. Pidieron, entonces, no caer en estos discursos manipuladores.
Después de exhortar a las autoridades competentes a buscar soluciones pacíficas y justas, los representantes de los credos señalaron que “El Evangelio de Jesús nos llama a poder encontrarnos en el camino con otros y otras en la búsqueda de un tiempo distinto y mejor, donde la paz sea el fruto de la justicia y no el resultado de la opresión de los poderosos sobre los más débiles”.
Piden a Dios, fuente de amor, verdad y justicia, que cese toda violencia y se resuelva el conflicto con verdadera paz y justicia.
Hasta la noche de este martes se vivía en la zona un clima de tensión porque continuaba, con las fuerzas de seguridad, el operativo desalojo de la comunidad mapuche en las tierras tomadas.
