La construcción de un nuevo centro social, con la participación de Cáritas, en la avenida Padre Tacoronte en la barriada de El Progreso de Badajoz se ha encontrado con el apoyo de las autoridades –con la excepción de la oposición municipal del PSOE– pero con la oposición de algunas asociaciones vecinales de la zona. Las tensiones se han acumulado debido a que el ayuntamiento ha avanzado el proceso de adjudicación ya que esperan financiar el proyecto con los fondos europeos. Ante la polémica, el arzobispado de Mérida-Badajoz se ha manifestado a través de un comunicado en el que reitera que “Cáritas solo está movida por mejorar las condiciones de vida de los más vulnerables”.
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Sin intereses políticos
La diócesis ha recalcado que “la acción de Cáritas diocesana, como organismo para el ejercicio de la caridad y la acción social en la Archidiócesis de Mérida-Badajoz, sigue la Doctrina Social de la Iglesia y no se confunde ni está ligada a partido político alguno”. En un comunicado anterior, Cáritas recordó que “este proyecto nació del trabajo colaborativo entre el Ayuntamiento de Badajoz, la Junta de Extremadura y Cáritas Diocesana tras la necesidad detectada en la pandemia y el compromiso conjunto de atenderla”.
Para la Iglesia, “Cáritas reconoce las necesidades de los vecinos del barrio, con los que quiere colaborar siempre”, si bien recuerda que “su única finalidad es mejorar las condiciones de vida de las personas más desfavorecidas, trabajando por los más pobres y la justicia social”. Por lo tanto desde la diócesis reiteran “que todas las partes implicadas trabajamos y buscamos mejorar las condiciones de vida de las personas más vulnerables de nuestra sociedad, para lo que se hace necesaria una verdadera colaboración institucional”.
