Entre el 17 al 21 de octubre han celebrado su 152ª Asamblea plenaria con dos temas centrales en su agenda: violencia social y explotación de la naturaleza
Los obispos de Ecuador han celebrado la 152ª Asamblea plenaria entre el 17 al 21 de octubre con dos temas centrales en su agenda: violencia social y explotación de la naturaleza.
Al cierre, han suscrito un mensaje en el que se han comprometido a seguir aunando esfuerzos para superar “la actual crisis moral, social y ecológica, convencidos de que es necesario caminar juntos, desde criterios y valores éticos y espirituales”.
“Hacemos una invitación para que multipliquemos nuestra oración por nuestro país, por la conversión de los violentos, por la paz y la justicia”, apuntaron.
Los prelados han señalado que “la violencia social y la explotación de la naturaleza, en todas sus formas y niveles, sigue causando dolor y enlutando a muchas familias ecuatorianas, como también contaminando y destruyendo el medio ambiente”.
“Esta situación, insostenible, exige que las autoridades del Estado y la sociedad civil trabajen por una cultura de paz, basada en el respeto a los derechos humanos y en el cuidado de la Casa Común, a través de acciones concretas y escuchando el clamor de quienes sufren”, acotaron.
Tras el cierre de las mesas de negociación entre gobierno y sectores indígenas, una vez más han recordado que las acciones que contribuyan al bien común “harán posible que se garantice la vida y la seguridad de todos”.
Por supuesto, debe canalizarse mediante “la justa distribución de los recursos naturales y económicos, especialmente en favor de los pobres y los pueblos excluidos”.
Foto: CEE