El debate de los obispos estadounidenses sobre si dar (o no) la comunión a los políticos que apoyan el aborto parece que aún está muy vivo, a pesar de que hasta el Vaticano haya pedido que abandonen la idea. Ejemplo de ello han sido los ataques directos que ha lanzado el arzobispo emérito de Filadelfia, Charles Chaput, contra el presidente Biden.
“Los católicos estadounidenses hemos tenido una lucha de 200 años para encajar en la cultura dominante, y hemos tenido éxito. Pero en el proceso, hemos sido digeridos y blanqueados por la cultura, en lugar de leudarla de una manera fértil con un testimonio católico distintivo, donde la apostasía del Sr. Biden sobre el tema del aborto es solo el ejemplo más repugnante”, dijo durante el discurso de apertura en el Simposio Eucarístico en la Catedral de Santo Tomás Moro en Arlington.
“Él no está solo”, continuó el prelado. “Pero en un mundo cuerdo, su liderazgo público único haría, o debería hacer, que las consecuencias públicas fueran inevitables”, añadió, haciendo referencia a la negativa de ofrecerles la comunión a los políticos que adopten esta postura.
“Cuando rompes libremente la comunión con la Iglesia de Jesucristo y sus enseñanzas, no puedes pretender estar en comunión cuando es conveniente”, continuó. “Esa es una forma de mentir”, subrayó, “y el Sr. Biden no está en comunión con la fe católica. Y cualquier sacerdote que ahora le da la Comunión al presidente participa de su hipocresía”.