El purpurado, que es uno de los hombres del Papa en Estados Unidos, pierde la elección ante el prelado de Oklahoma, al que toda la prensa católica estadounidense presenta como conservador
La Asamblea Plenaria del Episcopado estadounidense continúa, en esta segunda jornada, con la renovación de su cúpula. Y lo hace eligiendo como secretario general al arzobispo de Oklahoma, Paul Coakley, frente al cardenal arzobispo de Newark, Joseph Tobin, uno de los hombres del Papa en Estados Unidos.
Coakley, de 67 años, fue en 2018 uno de los prelados que se posicionaron junto al ex nuncio del Vaticano, Carlo Maria Viganò, cuando este publicó un manifiesto en el que llegaba a pedir, incluso, la renuncia de Francisco. De hecho, en aquel momento declaró su “más profundo respeto por el arzobispo Viganò y su integridad personal”.
El nuevo secretario general se une, tras haber superado a Tobin en las votaciones con 130 votos frente a 104, al arzobispo castrense Timothy Broglio, que será nuevo presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos. Ambos, considerados como conservadores por la prensa católica estadounidense.
Junto a Broglio era elegido ayer el vicepresidente, el arzobispo William E. Lori, de la diócesis primada de Baltimore. Desde 2020 capitaneaba la estrategia provida de la Conferencia Episcopal, si bien esta ha ido cambiando el foco de lo doctrinal a lo pastoral, en lo que al aborto se refiere.