Hélder Cámara sigue sumando pasos en su camino a los altares tras el anuncio de que tan solo falta la declaración del papa Francisco para que el obispo brasileño sea considerado venerable, siervo de Dios.
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Fernando Saburido, obispo de Olinda- Recife, dio esta importante noticia en la misa de clausura del 18º Congreso eucarístico nacional, celebrado entre 11 al 15 de noviembre.
Precisamente don Hélder fue arzobispo de esta jurisdicción de 1964 a 1985 y fue artífice de la llamada “Casa del pan”, creada para atender a quienes viven en situación de calle en Recife.
Siempre será recordado por ser uno de los promotores del Pacto de las Catacumbas durante el Concilio Vaticano II y una de sus figuras claves. Sobre todo por su opción preferencial por los pobres y denuncia contra las dictaduras de entonces.
No en balde acuñó esta frase: “Cuando doy comida a los pobres, me llaman Santo. Y cuando pregunto porque no tienen comida, me llaman comunista”, que fueron usadas por el propio Francisco en su discurso de Navidad a la Curia Romana en 2020.
Causa encaminada
El obispo de Olinda-Recife, en declaraciones para Vatican News, afirmó que desde esta jurisdicción hay júbilo por esta noticia.
“Esa es la gran alegría que llenó nuestros corazones y vamos a rezar para que cuanto antes podamos ver avanzar este proceso y tener en el futuro la satisfacción de tener como santo a Dom Helder”, acotó.
Frei Jociel Gomes, vicepostulador de la causa de Héder Cámara, aseguró que el decreto fue emitido en Roma para reconocer que “todos los actos y toda la documentación realizados en la Arquidiócesis fueron aprobados por el Dicasterio de las Causas de los Santos”.
Desde ahora comienza el proceso, en el que se nombrará un relator para iniciar “la elaboración de la la positio, que será posteriormente analizada por las comisiones de historiadores, teólogos, obispos y cardenales a fin de que den sus pareceres. Con la aprobación de estas comisiones, el Papa podrá declararle venerable”, explicó Gomes.
Perfil de Hélder Cámara
Hélder Pessoa Câmara nació el 7 de febrero de 1909 en Recife. Fue uno de los fundadores de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) y plantó cara contra la dictadura militar brasileña (1964-1985).
Ingresó en el Seminario Diocesano de Fortaleza en 1923. Tras sus estudios de filosofía y teología, fue ordenado sacerdote el 15 de agosto de 1931 con autorización de Santa Sede, porque tenía 22 años.
Recién ordenado, fundó la Legión Cearense del Trabajo y, en 1933, la Sindicalización Obrera Femenina Católica, donde congregó a las lavanderas, limpiadoras y empleadas domésticas.
En 1936 fue trasladado a Río de Janeiro. Allí desarrolló diversas tareas eclesiales, como Director Técnico de la Enseñanza de Religión y fue director espiritual de Leonel Franca, el fundador de la primera universidad católica de Brasil – la Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro.
En el período de posguerra, creó la Comisión Católica Nacional de Inmigración para apoyar a migrantes, refugiados y desplazados.
En 1952, fue nombrado obispo auxiliar de Río de Janeiro con 43 años. Estuvo como delegado de las Conferencias Episcopales Latinoamericanas desde Río en 1955 hasta 1992. Ejerció como presidente y vicepresidente del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam).
El 12 de marzo de 1964 fue designado arzobispo de Olinda y Recife, Pernambuco, cargo que ejerció hasta que renunció por edad el 2 de abril de 1985. Estuvo como emérito en esta jurisdicción y falleció el 27 de agosto de 1999.
Foto: Celam
