Alrededor de 7 mil personas participaron en el Día del Laico a la luz del pensamiento del beato Anacleto González Flores
Este 20 de noviembre, el estadio Miguel Alemán de la diócesis de Celaya, congregó a unas 7 mil personas para celebrar el Día del Laico, con momentos de oración, exposición del Santísimo sacramento y la conferencia “Osadía cristiana para la transformación social”, además de un panel de diálogo.
Los laicos mexicanos se inspiraron en el pensar y actuar de su patrono, el beato Anacleto González Flores; y se comprometieron a “dejar la pasividad” y “llevar a Cristo, que quiere reinar en todos los lugares donde los laicos podemos llegar”, según lo declarado por la maestra Denisse María Arana, secretaria ejecutiva de la Dimensión Episcopal para los Laicos (DELAI).
La maestra Arana clamó por un México “donde vuelva a reinar la paz, el amor, los valores que nos hacen vivir mejor y tener mejores condiciones de vida, de convivencia y volver a humanizar la sociedad, llenándola de Cristo”.
En ese contexto, se llevó a cabo una rueda de prensa en la que el responsable de la Dimensión Episcopal de los Laicos y obispo de Celaya, Víctor Aguilar Ledesma, hizo un llamado a los sacerdotes para que acompañen a los laicos: “es tiempo de acercarnos, un acercamiento con ternura, proponiendo el Evangelio y tomados de la mano para caminar”.
Para el obispo Aguilar, “si tomamos en serio la sinodalidad, podríamos acabar con esas dos enfermedades que tenemos en la Iglesia: el clericalismo y el pasivismo laicales; dicen que una es consecuencia de la otra, el clericalismo crea laicos pasivos y los laicos pasivos crean el clericalismo. Si aprendemos a caminar juntos sacerdotes con laicos, y laicos con sacerdotes, ese es el reto”.
Por su parte, Leonardo García Camarena, quien encabeza el movimiento Misión Rescate México, alertó que el mundo está plagado de propuestas contrarias a la naturaleza humana, “por lo cual debemos responder de manera decisiva, desde nuestra vocación y misión de laicos comprometidos a colaborar en el plan de Dios por un orden justo, a fin de reconocer y promover la dignidad de la persona que nace de nuestra semejanza con Dios como hijo suyo desde el bautismo”.
Manifestó que México “nos necesita, clama a esa Iglesia unida”, por lo que hizo un llamado a trazar rutas concretas, sumados para erradicar la impunidad y la corrupción del sistema judicial. Estamos en una sociedad secularizada, que gime de dolor y desesperación, es la hora de los laicos es tiempo de actuar y manifestar la verdad fundamental en el Evangelio, siendo una Iglesia viva, unida, en salida, que nos hace a todos partícipes con un espíritu de comunión y sinodalidad”.
Finalmente, Blanca Barbosa, coordinadora de la DELAI, puntualizó que los compromisos principales que asumieron los laicos son: ser laicos formados, informados, activos y transformadores “con nuestro testimonio… y que actuemos para vivir todo esto en un ambiente de no violencia”.