Ricardo Montaner: “Dios controla mi ego”

Padre de familia, protagonista de tele realidad, hombre de múltiples nacionalidades y, por encima de todo, cantante dueño de dos premios Grammy y un Billboard. Le avalan 65 millones de discos vendidos en todo el mundo y multitud de seguidores tanto en redes sociales como en su ‘reality’ de Disney+. Este mes podremos disfrutar de sus éxitos atemporales como ‘Me va a extrañar’ o ‘Aunque ahora estés con él’ gracias a su recién estrenada gira española que arrancó en el madrileño Teatro Real el 26 de noviembre.

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PREGUNTA.- Se vuelve a subir a los escenarios en nuestro país…

RESPUESTA.- Tenía ganas de visitar España y soy consciente de la cantidad de gente que me seguís desde los comienzos, pero también hay público nuevo y, por ellos, haré un combinado de las canciones que me acompañaron durante 30 años a lo largo de mi vida. Son dos horas y media de ‘show’: ¡Les pido que vayan comidos y bebidos para que me aguanten las ganas!

Un camino largo y maravilloso

P.- ¿Cuál es la fórmula de su éxito?

R.- No lo pienso. Cuando miro atrás, cuando todo comenzó, nunca imagine que el camino sería tan largo y maravilloso. Nunca tuve esa capacidad de sueño como para proyectarme tan lejos. Sigo construyendo mi carrera.

P.- ¿Ha logrado que el ego no le venza?

R.- A mí el ego me lo controla Dios, porque basta con que yo despegue un poquito los pies, para que Él me vuelva hacia abajo y me diga: “Quédate tranquilo, ¿para dónde vas? ¡Que tu luz soy yo!”. Yo creo que Dios es el que se encarga de ponerte ese cable a tierra y de decirte: “No te creas lo que no eres y mantente ahí pegado, dependiendo de mí”.

Telonero de grandes estrellas

P.- Ha colaborado con artistas de todo el mundo. ¿Quién le falta?

R.- El comienzo de mi carrera fue como telonero de las grandes estrellas de aquella época y lo fui muchas veces de Raphael. Con el tiempo vieron que el telonero de Maracaibo no lo hacía tan mal. Si hoy pienso con quién querría colaborar, te digo sin lugar a dudas que con él: con Raphael. No pierdo la esperanza de que sea posible, porque sigue siendo un artista inmenso al que adoro. (…)

P.- ¿Cómo lleva un cristiano ese día a día en el mundo de la farándula?

R.- La mejor prédica es la práctica de vida. En lugar de pasear la Biblia, hay que demostrarle a la gente que se puede ser feliz leyendo el “rey de reyes”, no molestando a nadie y abrazando siempre al prójimo. No somos cristianos inscritos en un club, sino por nuestra forma de vida y la fe en Dios.