A través de un comunicado titulado “Un aporte sencillo, un paso para ser más ciudadanos y no sólo habitantes”, los obispos de las dos jurisdicciones eclesiásticas de la provincia de Chubut, alertaron sobre una iniciativa de modificación del sistema eleccionario.
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Este documento lleva la firma del titular de Comodoro Rivadavia, Joaquín Gimeno Lahoz, de su auxiliar, Roberto Alvárez; y del prelado de Esquel, José Slaby. Allí expresan que el acto eleccionario es uno de los elementos más importantes del sistema democrático porque allí “habla el pueblo”; elige a quienes lo representarán en las deliberaciones y gobierno.
Creen, además que no alcanza con “ir a votar”, sino que son necesarias otras instancias que garanticen la voluntad popular. Específicamente, mencionaron que se trata del “grito sagrado, el momento supremo donde el pueblo, con su elección, les hace saber a sus representantes que su poder es delegado; que el poder legítimo supone el consentimiento del pueblo; que ese es el contrato social”. Recordaron que el beato Fray Mamerto Esquiú, para defender la Constitución Nacional, parafraseaba a Rousseau: “Nos inclinamos ante la ley, para no arrodillarnos ante nadie”
Aspectos a considerar
Los obispos patagónicos consideraron indispensable que ante la iniciativa de suprimir las Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias (PASO) y avanzar con una eventual Ley de Lemas analizar tres elementos:
La necesidad. Ante muchos reclamos de las minorías (boleta única, financiación de las campañas, igualdad de transparencia y oportunidades en la fiscalización) que no encuentran cauce institucional, se preguntar si estas inquietudes no merecen mayor premura en su tratamiento.
La oportunidad. Consideran que cualquier modificación debería contar con el tiempo necesario para generar espacios de reflexión y debate. “El apuro hace suponer intereses puntuales y no una mirada a largo plazo”.
El consenso. Para cualquier cambio o modificación en el sistema eleccionario que perdure en el tiempo debe nacer de consensos multipartidarios. “Los cambios deben tener la ponderación y el debate prolongado en el tiempo que garantice la reflexión y ecuanimidad de toda la población”, señalaron.
Partidos fuertes
Los obispos consideraron que “el sistema actual busca potenciar la existencia de partidos fuertes”, que con el tiempo generaron equipos entre candidatos que comparten un ideario, una dirección, y que privilegian unos valores sobre otros. La interna partidaria sirve permite elegir los matices o subrayados de esos idearios; es un paso cualitativo.
Anhelan que los candidatos de un mismo partido se esfuercen por representar ese ideario, y diseñen con ahínco y creatividad un programa para llegar a todos los chubutenses que viven distintas realidades. Asimismo, esperan que en el tiempo de las elecciones generales se debatirán modelos y perspectivas más diversas, pero que se reconocen poseedoras sólo de una parte de la verdad.
“Alterar o modificar el sistema electoral es tocar el CPU del sistema democrático”, manifestaron los obispos chubutenses. Y pidieron que todos se involucren para que no se trate de un acuerdo entre algunos. «Si realmente se quiere crecer en participación ciudadana, lo razonable y lo que garantiza una discusión desapasionada es esperar a que pasen los comicios venideros. Sólo así se cumplirá con aquel sueño de hacerla “más ordenada y transparente … equitativa y democrática”».
