Las autoridades ucranianas han informado, a través de un comunicado de su servicio de seguridad, que impondrán sanciones a 10 eclesiásticos vinculados a la Iglesia Ortodoxa dependiente del patriarcado de Moscú. Todos ellos serían distinguidos clérigos que habrían aceptado colaborar con las autoridades rusas de ocupación o justificado la invasión del Kremlin.
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Fieles a Moscú
Estos sacerdotes se han hecho eco de la postura oficial del propio patriarca Kirill, que no ha ocultado su apoyo a los pasos dados en todo momento por el presidente Vladimir Putin. Para las autoridades ucranianas estos religiosos habrían acordado cooperar con las autoridades rusas, promovido discursos prorrusos. Todos los sacerdotes viven en las zonas ucranianas donde la presencia rusa es mayoritaria o están ya en el extranjero.
Además, las autoridades ucranianas han ratificado que “el Servicio de Seguridad de Ucrania sigue llevando a cabo una amplia labor de protección del Estado ucraniano y continuará desenmascarando a las personas que amenacen la soberanía y la integridad territorial de Ucrania“. Y es que, aunque formalmente la Iglesia ucraniana ha roto sus lazos con la laIglesia Ortodoxa rusa el pasado mes de mayo, muchos fieles tienen clérigos fieles a Moscú, especialmente en algunas zonas rurales o del oriente del país.
