Al atardecer del jueves anterior a la Nochebuena, un voraz incendio se desató en los cerros de Viña del Mar, región de Valparaíso, en la costa frente a Santiago, afectando más de 300 viviendas. Ya el Domingo el gobierno pudo anunciar que el incendio estaba controlado, aunque aún se mantenían acciones para apagar completamente focos aún activos.
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El viento y mucho material combustible, sobre todo de las viviendas, facilitó la expansión rápida del fuego. En las quebradas se habían instalado cientos de viviendas precarias, en madera, sin autorización legal, de familias que no tenían un lugar donde vivir. Datos oficiales señalan que el déficit de viviendas en Chile supera los 500 mil hogares, un 9% del total del país. De ese total, el 44% se localiza en la Región Metropolitana, siendo Valparaíso una de las regiones que la siguen.
Zona en estado de catástrofe
El Subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, informó hoy lunes que el Ministerio de Desarrollo Social ha hecho un catastro que señala que 280 familias y viviendas fueron afectadas, más del 90% con pérdida total. El gobierno entregará viviendas de emergencia, informó Monsalve. “Esperamos gestionar durante la primera quincena del mes de enero la entrega de las viviendas de emergencia”, dijo.
Se ha informado de 125 hectáreas quemadas en las que 130 viviendas fueron destruidas totalmente por el fuego y muchas otras quedaron afectadas. También se ha confirmado la muerte de dos personas y 30 lesionados, de ellos 3 bomberos.
Al segundo día del siniestro llegaron hasta el lugar el Presidente Gabriel Boric y varios de sus ministros. La magnitud del daño que pudieron constatar motivó el decreto de Estado de Catástrofe por calamidad pública en la comuna.
Movilización para controlar el fuego
El subsecretario Monsalve informó que, para el control del siniestro, el mismo jueves se destinaron 9 helicópteros, 12 brigadas de la Corporación Nacional Forestal, 109 vehículos de Bomberos y 870 voluntarios, más 8 vehículos de emergencia que llegaron desde la Región Metropolitana. Carabineros, por su parte, dispuso el desplazamiento de 5 carros lanzagua, cada uno con capacidad para 15 mil litros. Además, trabajaron 4 brigadas nocturnas, siete aviones cisterna, un avión de coordinación, siete camiones cisterna y maquinaria pesada para crear zonas de mitigación y cortafuegos.
Al día siguiente se agregaron 8 helicópteros de apoyo, otro Super Puma, uno Chinook (especializado en incendios forestales) de alta capacidad y 8 aviones.
Para acoger a los damnificados que perdieron sus viviendas fueron habilitados albergues en el Hotel O’Higgins y en 2 establecimientos educacionales, otro se habilitó como centro de acopio.
Se activa la solidaridad
Aún no se controlaba el incendio cuando Cáritas Chile y Cáritas Valparaíso activaron la “Campaña solidaria por Viña del Mar”, en todo el país, para recaudar dinero, a través de una cuenta bancaria, que permita ayudar a los damnificados. También varias Municipalidades del país lanzaron campañas para recolectar víveres, artículos de higiene y medicamentos para llevar a los albergues donde están instaladas las familias que perdieron sus viviendas.
El obispo de Valparaíso, Jorge Vega Velasco, svd, visitó la población Nueva Aurora desde donde envió un mensaje por Facebook en el que comparte su dolor al constatar lo que esas familias han vivido y siguen viviendo. “Lo que veo es casi apocalíptico”, dijo el obispo. “En segundos el fuego destruyó todo y estas familias lo perdieron todo”. Sin embargo, se mostró sorprendido por la esperanza que aprecia en esas personas quienes, a pesar del dolor, esperan salir adelante. “Me han dicho, precisó el obispo, que han salvado lo más importante: la vida”. Agrega Vega que “esa esperanza nos anima a ayudar a esta gente que ha perdido todo. La Navidad se ha transformado en consumismo. Esta Navidad esta familia que me acompaña no tendrá un hogar. Por eso quiero invitarles a vivir una navidad con sentido, a salir al encuentro de estas personas que tienen todo destruido. Vamos al encuentro de ellos como si fuésemos al encuentro del Niño Jesús en Belén”, pidió el obispo de Valparaíso.
Hoy lunes, el gobierno anunció una ayuda inmediata: la entrega de un bono de $1.500.000 (unos €1.600) a cada familia que perdió su vivienda. Otra medida de ayuda gubernamental será la entrega de viviendas de emergencia que, según anuncio el subsecretario Monsalve, esperan entregar a mediados de enero.