La celebración de la Navidad no ha sido nada pacífica en la parroquia evangélica de Ruokolahti, en Finlandia. Y es que el pasado 25 de diciembre un incendio arrasó el templo totalmente construido de madera. Ahora la policía investiga este suceso que se produjo con los feligreses dentro de la iglesia, a pesar de que no ha habido víctimas.
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Fuego intencionado
“Supongo que ahora hay sospechas de intención maliciosa porque no se ha encontrado ninguna otra causa razonable” ha asegurado la pastora de la parroquia Leena Haakana al periódico El Mundo. Por ello la policía finlandesa investida este incendio con la hipótesis de que fue un acto malintencionado. A finales del pasado mes de septiembre la iglesia de Kiihtelysvaara al sureste del país también fue arrasada por las llamas mientras los fieles tenían una celebración, aunque en la investigación no se pudieron encontrar muchos indicios.
En la celebración participan ese día entre 30 y 40 feligreses y todos ellos pudieron abandonar a tiempo el edificio de esta localidad situada cerca de la frontera suroriental con Rusia. A pesar la actuación de los bomberos, no se pudo salvar la estructura. Un dato preocupante es que en las puertas laterales de la iglesia se habían colocado cuerdas para impedir que la gente saliera del templo durante el fuego. A unos 30 kilómetros de la iglesia ardió una vivienda y la policía encontró el cadáver de la persona que residía allí. No se descarta una relación entre los hechos.