La Conferencia Episcopal Brasileña reivindica el Estado de Derecho ante los atentados de los simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro
La Conferencia Episcopal Brasileña se ha mostrado “perpleja por los graves y violentos acontecimientos en Brasilia” y a través de sus redes sociales oficiales ha hecho “un llamamiento a la serenidad, a la paz y al cese inmediato de los ataques criminales contra el Estado Democrático de Derecho”. Además, han reclamado que “estos atentados deben contenerse inmediatamente y sus organizadores y participantes deben rendir cuentas con todo el peso de la ley”.
Para el Episcopado, “hay que proteger a los ciudadanos y la democracia” ante los ataques los simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro, que no aceptan la victoria del nuevo presidente Inacio Lula da Silva y que han irrumpido en los edificios de las más altas instituciones del Estado, en un asalto que recuerda al realizado hace dos años por seguidores de Trump en el Capitolio de los Estados Unidos.
Entre los objetivos de los asaltantes están el palacio de Planalto, sede de la presidencia, o el edificio del Tribunal Supremo Federal, a pesar de que la Policía ha conseguido mantenerlos bajo control. La intensidad de las protestas ha obligado al uso de gases lacrimógenos para intentar repeler a miles de personas que lograron romper los cordones de seguridad en torno al Parlamento nacional.