En los últimos años, la Iglesia en Nicaragua ha sufrido de persecución por parte del régimen de Daniel Ortega, pese a ello, las vocaciones religiosas continúan en aumento. Y es que este domingo 15 de enero, 88 seminaristas de la arquidiócesis de Managua fueron enviados en misión a cinco parroquias de esa Iglesia particular, mientras que nueve más recibieron la sotana para iniciar su formación en el Seminario Mayor, luego de haber concluido su año propedéutico.
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El acto tuvo lugar en el marco de una misa oficiada por el arzobispo Metropolitano, el cardenal José Leopoldo Brenes, quien explicó que los seminaristas están iniciando lo que hace parte de la recta final de los siete años de formación. Por ello, durante 15 días estarán en misión a las parroquias designadas.
Las parroquias son: Nuestra Señora del Perpetuo Socorro Masachapa; Nuestra Señora del Carmen Villa el Carmen; Jesús de la Divina Misericordia Managua; Sagrado Corazón de Jesús Las Maderas y el Santuario Cristológico Nuestro Señor de Esquipulas La conquista, Carazo.
Misión como parte del proceso vocacional
Según reporta Vatican News, se trata de una experiencia vocacional que la arquidiócesis de Managua ha venido realizando desde hace años, la cual forma parte de la formación sacerdotal.
Consiste -explicó Brenes- en ir en misión a las parroquias rurales, “conviviendo con su gente en sus casas, acompañando y escuchando, a los jóvenes, a los niños, a los ancianos”, dijo.
La arquidiócesis de Managua informó que el arzobispo invito a los seminaristas a vivir este momento desde la oración y los exhortó a vivir las misiones en con un espíritu de escucha de la Palabra de Dios que se vive con el pueblo y en las comunidades.
Pidió a los fieles a seguir orando por los sacerdotes y obispos, así como por los seminaristas para que se dejen guiar por el Espíritu Santo durante estos años de formación; finalmente, agradeció a los sacerdotes formadores y familiares por acompañar a estos jóvenes en su proceso vocacional.
El acto se da en un momento complicado para la Iglesia nicaragüense, con el arresto domiciliario del obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez, quien enfrentará un juicio por presunta conspiración y difusión de falsa información contra el gobierno de Ortega.
Además, el año pasado el régimen sandinista expulsó al nuncio apostólico Waldemar Stanislaw Sommertag y a 18 religiosas de las Misioneras de la Caridad de la Madre Teresa de Calcuta.
Asimismo, se encuentran en prisión siete sacerdotes y dos colaboradores de la diócesis de Matagalpa, mientras que fueron cerradas nueve emisoras de radio católicas y se retiraron los permisos a tres canales católicos de televisión por suscripción. El gobierno también ha prohibido las procesiones y peregrinaciones religiosas.